Es el caso del ahora morenista Gustavo Limas, excandidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a regidor en la Huacana en 2021, quien superó 16 veces a uno la votación del exgobernador y exsecretario de Organización de Morena Leonel Godoy.
En ese mismo distrito, el 01 de Michoacán, la síndica municipal en La Huacana, Yaritza Rosas Gaona, quien en 2021 también fue abanderada del PRI, resultó prácticamente la morenista más votada del país, pues alcanzó 11,338 sufragios.
El ritmo de votación que alcanzó fue de 1,417 votos por hora, casi 24 por minuto y un sufragio cada 39 segundos.
En una entidad del norte del país, en el “triángulo dorado” de Sinaloa, en Cosalá, casi frontera entre Durango y Chihuahua, los morenistas llegaron a un récord de un voto cada 20 segundos.
Mas aún, la alcaldesa de Cosalá, Carla Úrsula Corrales, quien ganó en 2021 el ayuntamiento en alianza Morena-Partido Sinaloense (PAS), obtuvo más votos en el proceso interno, 5, 868, que en las elecciones constitucionales, donde en coalición sumó 4,768 votos.
Por ese mismo distrito, el 6 de Sinaloa, el morenista Manuel de Jesús Guerrero alcanzó 4, 585 votos, es decir, a un ritmo de nueve sufragios por minuto.
En tanto, en el distrito 10 de Veracruz, con cabecera en Xalapa, el electo fue Esteban Ramírez Zepeta, actual delegado en funciones de dirigente estatal y quien buscará dirigir la entidad. Él alcanzó una votación presuntamente atípica de 6 mil 37 votos, es decir, un sufragio cada 20 segundos.
Estos cuatro personajes, Limas, Corrales, Guerrero y Ramírez, se perfilan como algunos de los más votados en la elección morenista, y las asambleas distritales en las cuales contendieron, en Michoacán, Sinaloa y Veracruz, no fueron declaradas inválidas por la dirigencia del partido guinda.
Los cuatro arrasaron incluso a un presidenciable morenista: el único integrante del gabinete presidencial que participó en la contienda: el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, quien en el distrito federal 06 de su estado, Tabasco –del que es gobernador con licencia- apenas alcanzó 1,250 sufragios.
Sin embargo el triunfo de todos estos morenistas aún es incierto, dada la opacidad en los resultados, lo que retrasará las resoluciones del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la federación (TEPJF) a las decenas de impugnaciones interpuestas.
Hoy al cumplirse el día 18 tras las asambleas distritales donde Morena votó en urnas en los 300 distritos del país, apenas se publicaron resultados de 9 de 32 entidades, estas fueron solo las de Tabasco, Sonora, Sinaloa, Puebla, Chihuahua, Coahuila, Colima, Baja California Sur, Nayarit.
Para el morenista John Ackerman, del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM y uno de los dirigentes de la Convención Nacional Democrática (CND) de ese partido, los casos de “altísima participación” y de personajes provenientes del PRI habla de las irregularidades que ocurrieron en el proceso.
“No se puede considerar que esa votación atípica fue democrática y voluntaria, sino que se operó desde gobiernos estatales, municipales, se usaron recursos públicos, se compró el voto o se condicionaron programas para lograr esas votaciones”, dice.
Maxime porque, explica, en las asambleas distritales se permitió votar a personas que presentaron su afiliación al momento, por lo que es imposible que se diera ese ritmo de votación en segundos.
Lo que ocurrió, explica, es que “se les pasó la mano” en las cifras de votos que operadores regionales y locales provocaron en el proceso interno.