El pleito político de Mancera
La carrera de Miguel Ángel Mancera comenzó en el año 2000 como asesor en la comisión de Procuración y Administración de Justicia de la entonces Asamblea Legislativa del Distrito Federal. En el 2006, se incorporó al gobierno de Ebrard, como subprocurador de Averiguaciones Previas Centrales en Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF), de la cual se hizo cargo dos años después, luego de que a consecuencia del operativo fallido en la discoteca News Divine, donde murieron 12 personas, se destituyera al entonces procurador, Rodolfo Félix y al secretario de Seguridad Pública, Joel Ortega.
Fue en este cargo, donde comenzó a hacerse visible a través de la realización de operativos, detenciones importantes, así que cobijado por Ebrard, el exprocurador obtuvo la candidatura a la jefatura de gobierno por el PRD, pero como una figura independiente y externa, pues no militaba en el partido, dejando en el camino a otros contendientes como el propio, Joel Ortega, quien en su gobierno ocuparía la dirección del Metro.
En 2013 ganó las elecciones con poco más del 60% de los votos, pues Marcelo Ebrard contaba con una alta popularidad y uno de esos factores, fue justamente, la puesta en marcha de la línea 12 del metro.
Mancera y Ortega, iniciaron las investigaciones sobre las fallas en la "línea dorada" y con ello también comenzó el distanciamiento político con su exjefe. En la medida en que avanzaron las indagatorias y se comenzó a hablar de la presunta corrupción de las autoridades anteriores por el sobrecosto que significó la construcción, se dio un rompimiento definitivo, que mantuvo a Ebrard, fuera de México la mayor parte su sexenio.
El tema se politizó y a medida en que la presión de las investigaciones subieron, se acusó a Mancera de acercarse políticamente al presiente Enrique Peña Nieto.
La Cámara de Diputados instaló una Comisión Especial para el Seguimiento a los Recursos Federales Destinados a la Línea 12, que después de 10 meses de indagatorias, concluyeron que algunos de los exfuncionarios capitalinos podrían haber incurrido en el uso indebido de facultades y recomendó a la PGJ del DF y a la entonces PGR, integrar averiguaciones previas para deslindar responsabilidades, pero no se presentaron denuncias formales.
Un año antes, la Contraloría de la Ciudad de México sancionó a 48 servidores públicos por la fallas en la construcción, el funcionario de más alto rango fue el exdirector del Proyecto del Metro, Enrique Horcasitas, con una inhabilitación por 20 años, que luego la Suprema Corte de Justicia tiró vía un amparo.
En marzo de 2018, dejó la jefatura de gobierno para integrarse como asesor en la campaña presidencial del panista Ricardo Anaya, una candidatura que él buscaba encabezar, pero al final los acuerdos políticos entre los partidos PAN, PRD y Movimiento Ciudadanoque conformaron la alianza “Por México al Frente”, lo llevaron a la lista de los senadores por representación proporcional del PAN, partido por el que finalmente llegó a la Cámara Alta y del que por acuerdos internos, dejó para sumarse a la del PRD como su coordinador.
Como senador, Mancera ha estado a merced de los acuerdos con el presidente de la Junta de Coordinación Política, Ricardo Monreal, quien ha permitido al senador conservar su grupo parlamentario aun cuando solo son eran tres en la bancada, cuando la Ley Orgánica del Congreso General indica que deben ser mínimo cinco.
En junio del año pasado, la expresidenta del Senado, la morenista Mónica Fernández, ordenó la desaparición de la bancada del PRD, por no alcanzar el mínimo de integrantes, pero Monreal frenó la decisión. Actualmente, ya recuperaron los cinco integrantes con la incorporación de la panista, Xóchitl Gálvez.