En el caso de la intoxicación en Bochil, Chiapas, explicó que hay tres líneas de investigación por la intoxicación de estudiantes:
1. Cuatro alumnos declararon que un adolescente les compartió pastillas para bajar de peso, las cuales tomaron con una bebida energizante.
2. Que un hombre con un tatuaje de un animal en la mano, que llegó en moto de repartidor a la escuela, les dio botellas con agua.
3. Alumnos refirieron que al ver que sus compañeros estaban sintiendo mal, ellos también comenzaron a marearse y a desvanecerse, aunque aseguraron que no habían consumido agua o alimentos en la escuela.
La secretaria precisó que las investigaciones en torno a la intoxicación de estudiantes no está cerrada, por lo que las respectivas fiscalías mantienen las indagatorias.
En el caso de la secundaria 67 de Álamo, en Temapache, Veracruz, donde 49 estudiantes resultaron intoxicados, la secretaria informó que padres de familia manifestaron que mientras sus hijos se encontraban en un acto cívico percibieron una cortina de humo que provenía de laboratorio, a partir de la cual presentaron náuseas, vómito, dolor de cabeza y algunos se desmayaron.
Sin embargo, explicó que tras un peritaje criminalístico de la fiscalía no se encontró ninguna irregularidad en las instalaciones del plantel educativo.
Mientras que, en el caso de Hidalgo, la funcionaria señaló que las investigaciones arrojan que la presunta intoxicación de nueve alumnos de secundaria y 18 de nivel superior pudo ser una simulación.
“Los resultados salieron negativos a la presencia de sustancias prohibidas y se tiene la hipótesis de la Secretaría de Educación y de autoridades escolares que los hechos obedecen a una tendencia simulada en redes sociales”, añadió.