La impunidad que gozan los narcotraficantes en Badiraguato ha hecho que sea conocido como “La cuna del narco”. En aquel lugar domina la adoración a la Santa Muerte y a Jesús Malverde, a quien consideran un “Santo patrono” de los delincuentes. Aunque la tranquilidad reina en el pueblo, la herencia del narco y la generación de nuevos talentos para el trasiego de droga y los nuevos sicarios se van forjando día a día.
Badiraguato es un cuartel gigante para el Cártel de Sinaloa, algunos aseguran que ahí vive su “hijo pródigo”: Caro Quintero, a quien le gusta que le lamen “el narco de narcos”.
El presidente Andrés Manuel López Obrador conoce bien la pequeñita plaza, donde aparecen las palabras coloridas del nombre del poblado debajo de una pequeña estatua de Benito Juárez que tiene la frase mundialmente conocida: “El respeto al derecho ajeno, es la paz”.
Y conoce bien aquel temido lugar, pues lo ha visitado en distintas ocasiones, solamente como presidente ha ido un par de veces y este próximo sábado acudirá por tercera ocasión.
Lo que ha llamado poderosamente la atención de esta –extraña– supervisión de la carretera “Badiraguato–Guadalupe y Calvo” es que la oficina de prensa del gobierno federal catalogó el evento como “cerrado”, esto significa que no habría acceso a la prensa. Se dijo que no estarán presentes empleados del Centro de Producción de Programas Informativos y Especiales (Cepropie), ni fotógrafos del presidente.
Aunque horas después el vocero de la Presidencia, Jesús Ramírez, “aclaró” que los eventos de viernes y sábado serán públicos y los del domingo sí serán privados por la consulta del 1 de agosto.
Sobre la gira del presidente @lopezobrador_ de este fin de semana por Sinaloa, Durango y Nayarit, aclaramos: los eventos del viernes y sábado serán públicos; debido a la realización de la Consulta Popular del primero de agosto, las actividades del domingo serán privadas.
— Jesús Ramírez Cuevas (@JesusRCuevas) July 28, 2021