El Consejo de Fomento a la Inversión, el Empleo y el Crecimiento Económico que queda bajo su dirección junto con la banca de desarrollo, puede tener un papel estratégico en el mediano plazo para destrabar inversiones sectoriales y sobre todo, para poner la política pública a debate. Dado el desconocimiento en gestión de políticas públicas que hay en algunos niveles de la administración y el Poder Legislativo, el sólo hecho de que varias partes se sienten en una mesa a escucharse puede cambiar la dinámica de polarización y de buenos y malos que muchos querrían imponer en la agenda desde uno y otro lado, desde la 4T en un rincón y desde la defensa de las instituciones creadas en los últimos años en el opuesto.
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El Consejo contará con la participación de los secretarios del gabinete económico, representantes empresariales, sindicales y del sector social cuyo nombramiento sucederá en los próximos meses. Habrá consejos estatales para abordar los frenos al crecimiento de cada región, de donde se ordenará por prioridades que hagan sentido para los empresariados locales (por ejemplo, en proyectos de infraestructura carretera), y lo mismo sucederá a nivel federal por sectores. “Habrá tantas mesas como sea necesario”, dice Romo, con una concepción muy flexible de lo que debe ser esta institución.
Crear un entorno de confianza para la inversión es una obligación básica de este y de todo gobierno, pero en una administración con agenda social hay muchos puntos ciegos respecto a la agenda económica, como ya hemos visto estos siete meses".
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Es importante que el presidente López Obrador conozca cuáles son los obstáculos y las dudas que tienen las compañías que forman la columna vertebral de la actividad económica de este país (las grandes, las medianas y las pequeñas), a la hora de invertir y contratar, y que haya respuestas. Si del Consejo de Fomento se convierte en la plataforma de detección de frenos a la inversión y empiezan a surgir iniciativas que respondan a los problemas sectoriales, cambiaremos el discurso ideológico por la acción eficaz. Porque, aunque muchos parece que no lo saben, este gobierno se queda hasta 2024 y México no tiene mucho tiempo que perder.