Cooperación en seguridad
En materia de seguridad habrá colaboración, siempre y cuando haya respeto a la soberanía de México, consideran los expertos consultados.
“Tanto México como Estados Unidos están conscientes de que se tiene que cooperar para el combate de los grupos de narcotraficantes en México porque eso afecta a los dos países. Es un problema compartido y la mejor alternativa es cooperar”, agrega Rafael Velázquez.
Para Estados Unidos, los cárteles son un objetivo debido a que son responsables de la producción de fentanilo, una droga está causando la muerte de más de 70,000 estadounidenses cada año.
“La gente lo quería desde hace años (designar a los cárteles como terrotistas). México probablemente no quiere eso”, reconoció Trump durante la firma de la orden ejecutiva en la Casa Blanca.
En la orden ejecutiva firmada por Trump se establece que los cárteles controlan funcionalmente, mediante una campaña de asesinatos, terror, violaciones y fuerza bruta, casi todo el tráfico ilegal a través de la frontera sur de los Estados Unidos.
"En ciertas partes de México, funcionan como entidades cuasi gubernamentales, controlando casi todos los aspectos de la sociedad".
Orden Ejecutiva sobre los cárteles firmada por el presidente de EU, Donald Trump.
En el documento, se señala que las actividades de los cárteles amenazan la seguridad del pueblo estadounidense, "la seguridad de los Estados Unidos y la estabilidad del orden internacional en el hemisferio occidental".
Vigilancia finaciera
La designación de los cárteles como organizaciones terroristas extranjeras conlleva consecuencias financieras.
“El Gobierno de Estados Unidos tiene la facultad de asumir disposiciones legales que le permitirán el monitoreo de transacciones financieras. Esto en materia de seguridad para México implica que todas las transacciones pueden ser pasadas a través de filtros para detectar lavado de dinero y de la realización de actividades ilícitas", sostiene Armando Rodríguez, consultor en seguridad, inteligencia y medios.
"Esto dejará a algunos sectores más vulnerables según el interés principal que definan las autoridades estadounidenses. Por ejemplo, de ser su prioridad el combate al tráfico de drogas de cara a la crisis por el consumo de fentanilo, los sectores farmacéuticos y de transporte estarán en la mira", agrega.
Para Rodríguez, la decisión de Trump de designar a los cárteles como organizaciones terroristas extranjeras es una forma más de presionar a México para que nuestro país combata a los cárteles de una manera más eficiente.
“Lo que vamos a ver en los próximos meses es una presión fuerte de parte del gobierno de Estados Unidos para que México sea más efectivo para detener a los carteles de la droga, para evitar el trasiego de las drogas hacia Estados Unidos. En caso de que México no cumpla, entonces en ese caso si veo una mayor presión y la posibilidad de que Trump declare a los grupos de narcotraficantes como terroristas y utiliza otros medios para combatirlos”, sostiene el catedrático de la UABC.
Designar a los cárteles como grupos terroristas no es una idea nueva. En 2011 y 2019 se planteó debido al nivel de violencia que generan, pero hacerlo también tendría implicaciones políticas y económicas.
“Son sanciones económicas, también de tipo migratorias, es decir, las personas de las organizaciones declaradas como terroristas no pueden ingresar a territorio norteamericano, tampoco ningún norteamericano puede realizar actividades económicas o comerciales con estas organizaciones. Es una sanción mediática como tal, se puede deportar a personas relacionadas con esas organizaciones, pero no implican una intervención armada”, explica el especialista en seguridad, David Saucedo.
Sin embargo, habrá riesgos si Estados Unidos realiza operaciones clandestinas en México a través de recursos tecnológicos para identificar a los principales actores criminales, por ejemplo, con vigilancia satelital y uso de drones; asimismo, la posibilidad de que se den incursiones selectivas de partes del Ejército estadounidense en el territorio mexicano.
“Este tipo de medidas afectarían de manera integral la estrategia que actualmente está implementando el Gobierno mexicano. Por una parte sería la detención de líderes y el trastrocamiento de las actividades criminales e incrementaría la violencia entre grupos criminales, también la violencia de estos grupos hacia las fuerzas de seguridad”, indica Rodríguez.
La designación de organizaciones terroristas aún debe cumplir varios requisitos y una ruta que se perfila de varios meses en el Congreso de Estados Unidos.
Mientras las órdenes ejecutivas se comienzan a aplicar, el gobierno de la presidenta Sheinbaum busca concretar una reunión con el equipo del presidente Donald Trump, con la cual, confía la morenista, se alcanzarán acuerdos.