Riesgo de los medicamentos irregulares
La gente no debería confiarse, subraya el investigador. Los riesgos de adquirir medicamentos ilegales son preocupantes. En algunos casos, no contienen los ingredientes activos y la enfermedad no será tratada. Otros de estos productos no son seguros ni eficaces, están caducos, contaminados o, en el peor escenario, incluyen sustancias tóxicas. Las consecuencias pueden ser fatales.
A finales de febrero de 2020, por ejemplo, 67 personas en tratamiento de hemodiálisis enfermaron tras recibir el medicamento heparina sódica contaminado con la bacteria Klebsiella spp y al menos 10 fallecieron. Los pacientes fueron atendidos en el Hospital Regional de Pemex en Villahermosa, Tabasco, donde un proveedor no reconocido vendió el medicamento.
“En Panamá, hace como 10 años, aproximadamente, le pusieron anticongelante de coches a un jarabe para la tos y hubo una mortandad bastante importante, hubo decenas de muertos en ese país”, sostiene el investigador del Cinvestav.
Afortunadamente, sostiene, la Cofepris ha mejorado sus métodos de detección de medicinas irregulares gracias a su colaboración con la industria. Sin esto, las falsificaciones se convertirían en un grave problema de salud pública, pues se venderían productos sin saber qué contienen ni su fecha de caducidad.
“En general, la Cofepris ha mejorado todos sus procesos, se ha profesionalizado, ha disminuido la corrupción, porque, en el pasado, la Cofepris sí tenía muchos problemas de corrupción a todos los niveles y en todas sus actividades”, sostiene el especialista.
Sin embargo, el presidente de la Asociación Nacional de Proveedores de la Salud subraya que las acciones que realiza Cofepris aún son insuficientes para controlar la piratería de fármacos y dispositivos médicos.
“Estamos trabajando en ello y, por supuesto, buscando la forma de que Cofepris cada vez se sienta más apoyada por la industria, dado que todavía sus esfuerzos son insuficientes para poder controlarlo”, subraya.