De todas las aspirantes, Bautista es la que tiene más antecedentes en el activismo feminista y, por su tránsito por el PRD recalcó que eso, haber sido parte de un gobierno de ese partido en Zacatecas y ser esposa de un subsecretario del gobierno federal –del subsecretario de Desarrollo Urbano Daniel Fajardo– no marcarán su actuación.
“Yo creo que tener relación con los partidos políticos, con personas militantes de partidos políticos no es algo que genere sospecha”, expresó y se dijo abierta a la pluralidad en su actuación y equipo. “Estoy dispuesta construir acuerdos, lo he hecho antes y lo haré ahora, considero que los protagonismos no son positivos en un órgano colegiado”.
Dado que tiene cinco años como asesora en el INE garantizó “conozco cómo trabaja por dentro el Instituto Nacional, tengo una visión y herramientas para afrontar los retos”.
Además, expuso que le preocupa el tema de los mecanismos de la democracia directa, asuntos en los que Morena ha cuestionado supuestas omisiones del INE para promover esas figuras.
“Me parece que algunos lo satanizan creo que ese debate está quedando atrás en la academia y que cada vez se habla más de los mecanismos de democracia directa como complemento a la democracia representativa y no como oposición a la democracia”, expresó.
Entre sus propuestas, pidió más discusión y tolerancia, pero que el debate sea “de calidad, pues yo creo que es una de las partes de la educación cívica, que nos hace falta reforzar, o sea que estemos más dispuestos al intercambio de ideas y no al borrado del otro”.
Abaratar elecciones
La candidata a a presidencia del INE Rebeca Barrera es de las cinco la única que, en apariencia, no tiene vínculos directos con Morena y tiene casi dos décadas dedicada a la materia electoral.
Sin embargo, en sus propuestas expuso -como ha argumentado Morena- que a su juicio sí es posible más austeridad y abaratar elecciones contratando la impresión de papelería electoral con empresas públicas –como talleres Gráficos de México, como hace el INE hoy– y se mostró a favor del voto y la urna electrónica.
La pandemia de COVID 19 ya demostró que es posible la aplicación de tecnología a diversos aspectos de la organización electoral, dijo, y eso haría “que las elecciones sean mucho menos costosas, que implementamos un sistema digital a través de las urnas electrónicas a través del sistematizar todos los procesos electorales más pequeños como son las elecciones estatales o como son las elecciones generales”.
En su experiencia como observadora en elecciones en Hidalgo, dijo, vio cómo el uso de urnas electrónicas fue eficiente y en tiempos rápidos.
“Inmediatamente se podría tener la información y esto puede llevarse de la mano con lo que hablamos ahorita de los resultados en el mismo día de la jornada electoral” como ocurre en otros países, razonó.
Como hizo siendo consejera electoral en Baja California Sur, explicó, “lo primero es verificar dónde realizar economías presupuestales. Y analizar cuáles son los beneficios de los funcionarios públicos para ver si son acordes a nuestra realidad”.
En ese organismo, recordó, “eliminamos celulares, vehículos oficiales y seguro de separación individualizada y todos esos temas y antes de entregar la administración del Instituto se tuvieron ahorros, dejé a la institución ahorros por 20 millones de pesos que pudieron emplear para comprar vehículos”.
Su plan ahora en el INE es “ver donde se está yendo el grueso del recurso por ejemplo en los temas de impresión de boletas más o menos tiene un costo de 1.25 centavos. Si nosotros vamos a contratar empresas privadas los costos aumentan. En el OPL nos fuimos con la empresa paraestatal por la seguridad que se tiene y por los costos se abaratan” dijo al proponer lo que el INE históricamente ya aplica.
“En todo el país se debe analizar si la boleta tendría que ser impresa en empresas privadas o en paraestatales y lo más ideal (sic) para ahorrar recursos es lo digital”, planteó la exconsejera local.
La pregunta ciudadana que se le hizo a Barrera en la entrevista con el CTE, fue respecto a la aplicación electrónica vía celular -y que la persona que envió el cuestionamiento llamó “racista y clasista” - que opera el INE para recabar firmas para candidatos independientes o nuevos partidos, en lugar de firmas en papel con fotocopias de credenciales.
Contradictoriamente a sus propuestas de urnas electrónicas y boleta digital, la aspirante aseguró que el uso de la aplicación tecnológica del INE “es discriminatorio porque en algunos rincones no existe internet (y) se tendría que utilizar las listas” firmadas en papel.
La aplicación del INE “tuvo sus detalles en ese proceso electoral” aseguró Barrera, y “estoy de acuerdo con lo que dice la ciudadana, que se permitan esas listas es lo mejor”.
Sin embargo la aspirante recordó que en el Instituto de Baja California Sur bajo su mando sí se operó esa app -que ahora consideró discriminatoria- y se detectaron firmas de personas fallecidas.