“En esta ocasión, por cuestiones de presupuesto, no nos alcanza para instalar esas más de 5,000 mesas receptoras de votación. Vamos a instalar prácticamente 2,400 y esto tiene que ver con el impacto en el dinero: instalar 2,400 mesas significa contar con todos los materiales, instalar urnas y un lugar digno donde puedas ejercer tus derechos y, además, contratar personal que pueda atender cada una de las mesas y pagarles por el día que están empleándose”, explica en entrevista con Expansión Política.
El IECM debe realizar este año dos consultas de Presupuesto Participativo de forma simultánea, que corresponden a 2023 y 2024, antes de las elecciones que tendrán lugar en junio del próximo año.
“Esto es así porque nuestra legislación no nos permite llevar ejercicios de Presupuesto Participativo cuando tenemos algún proceso electoral como va a ser en 2024, en donde vamos a renovar nuestra jefatura de Gobierno, las alcaldías y el Congreso local”, indica.
Para este 2023 el Congreso capitalino aprobó un presupuesto de 1,258 millones de pesos para el organismo electoral, es decir, 321 millones menos de lo que había solicitado el IECM. En respuesta, los consejeros electorales solicitaron a la Secretaría de Administración y Finanzas pidieron una ampliación de 110 millones de pesos.
El Instituto Electoral de la Ciudad de México ha solicitado aumentos a sus recursos al Gobierno central durante tres años consecutivos.
El Presupuesto Participativo es la parte de los recursos públicos sobre los cuales pueden proponer y decidir directamente los ciudadanos sobre cómo se aplicarán en sus colonias.