En la actualidad, cuando a nivel mundial se enfrentan fuertes desafíos, se tiene la posibilidad de reflexionar sobre los retos y oportunidades que comparten ambas naciones y la importancia de unirse para construir un mejor futuro para la región.
Recientemente se presentaron tres encuentros relevantes para fortalecer la relación bilateral entre México y Estados Unidos.
El primero fue la reunión entre el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y el presidente de Estados Unidos, Joe Biden.
Esta reunión necesitaba dar certeza a los mercados y a la inversión, así como señales positivas tanto al interior como al exterior de ambos países.
Finalmente se dio el anuncio de inversiones en la frontera por parte de Estados Unidos de 3,600 millones de dólares (mdd), y el compromiso de México de invertir 1,500 mdd en infraestructura en la frontera y la compra a Estados Unidos de productos como leche y fertilizantes.
Desde el sector empresarial consideramos positivo que se tuviera este diálogo de primer nivel y, sobre todo, que se lograran avances y se asumieran compromisos específicos de manera conjunta. Haremos un seguimiento puntual para que estos compromisos se cumplan y se garanticen mejores condiciones para la inversión.
El segundo consistió en una reunión del “CEO Dialogue” donde participaron empresas estadounidenses y mexicanas junto al presidente de México, en donde los empresarios le pidieron aplicar los compromisos firmados en el T-MEC sin necesidad de negociar acuerdos empresa por empresa, y el presidente de México se comprometió a que su gobierno propiciará las condiciones para mantener los acuerdos y la inversión.
En este encuentro se anunció una inversión de 40,000 mdd en México de ahora al 2024, por parte de empresas estadounidenses.
Otros compromisos asumidos tienen que ver con la inversión en tecnología y la agilización de trámites por parte de la Comisión Reguladora de Energía (CRE) para proyectos de inversión en materia energética.