Algo que -dice- no ocurre con las líneas de emergencia del gobierno, pues tres de cada cinco mujeres que en 2020 se acercaron a la Red Nacional de Refugios ya habían acudido anteriormente a una institución gubernamental y no se les había escuchado.
"Y tampoco sirve tener esa información si no se aterriza en acciones. Es una oportunidad importantísima y una deuda que tiene en nuestro país en poder transformar estos datos en acciones efectivas", dice la activista.
¿Persiste la doble pandemia?
"Sí, sin duda", responde Wendy Figueroa, y agrega que históricamente México tiene una pandemia que lacera y que deriva en una crisis nacional derechos humanos: las violencias machistas.
"Esto es una pandemia histórica, que se agudizó y evidenció (con el COVID-19). Seguimos en pandemia, en estas dos pandemias que han incrementado las violencias contra las mujeres, tanto físicas y sexuales como económicas", enfatiza.
Figueroa considera que ninguna de las dos pandemias ha sido abordada con perspectiva de género ni tienen una respuesta efectiva para la mitigación pese al incremento de casos.
En este sentido, advierte que sin un cambio de estrategias , basadas en la justicia integral y en la garantía de derechos humanos, México no solo seguirá teniendo estas dobles pandemias, sino que van a seguir aumentando las violencias contra las mujeres.
"(Preocupa) pensar en un nuevo confinamiento, en toda la extensión de la palabra, el regresar a las mujeres a ese espacio donde el patriarcado nos quiere tener controladas, pero, insisto, creo que la posibilidad de actuación viene desde los movimientos feministas, y nosotras seguimos preparándonos con acciones", expresa Figueroa.