“Voy a estar en la boleta, espero estar con Morena y con el presidente López Obrador”, le dijo Ricardo Monreal a Joaquín López-Dóriga el pasado 15 de julio . El entrevistador le recordó que hace años habían tenido una conversación similar, en alusión a la tentativa de ruptura con la que amagó Monreal cuando Claudia Sheinbaum le ganó la candidatura a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México. “Sí, lo recuerdo muy bien. Incluso fue una etapa en la que yo pude haberme ido de Morena”.
Pero no se fue. Terminó aceptando aquel resultado y, por hacerlo, consiguió una candidatura plurinominal al Senado y luego la coordinación de la bancada de Morena en la Cámara de Senadores. Ahora advierte, sin embargo, que las cosas son distintas: “No estoy buscando puestos de consolación”, le dijo en una entrevista a Mariel Ibarra y Carina García . Coronó la faena con estas últimas estocadas: “Soy fundador de Morena, soy militante de Morena y soy simpatizante de la 4T. Aunque debo de advertir que platico con todos los partidos, tengo esa facilidad, de que me puedo reunir con todos los partidos políticos, con todos los sectores de la población, sin que esto represente una herejía o una traición. Porque si no tenemos la capacidad de sentarnos a dialogar con todos los actores políticos o sociales del país, menos podríamos resolver o conducir a un país cuyo mosaico es verdaderamente notable”.