Tras una larga carrera en la administración federal en la que llegó a ser director de la Financiera Nacional de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y Pesquero, además de desempeñarse como diputado local y senador, esta es la cuarta vez que Mario Zamora aparecerá en las boletas electorales y asegura que “está cumpliendo un sueño, ya que desde joven aspira a ser gobernador de Sinaloa”.
Zamora viene de cepa priista y conoce las bases, pero también se mete de lleno en la política nacional como lo hemos visto en el Senado. Es una mezcla entre lo disruptivo, jovial, y experiencia. Una fórmula poco vista en tiempos de sequía de cuadros políticos.
Como legislador, atendía a los ciudadanos e interactuaba directamente a través de sus redes y ahora, hace una fuerte campaña presencial y cuando no se puede por la pandemia, en redes. Con decirle que hasta tiktok tiene.
Zamora dice que pone su hoja de vida al escrutinio público y que “porque de eso se trata una contienda electoral, de poner tu hoja de vida, qué has hecho, qué eres capaz de hacer, para que tú que nos estás viendo desde casa, tu negocio, donde estés, puedas vivir mejor, ese es el chiste”.
Es, para quienes han seguido su carrera y visto su trabajo, el candidato natural para el gobierno de Quirino Ordaz.