Vacunar primero en zonas remotas es mala idea

Todas las instituciones públicas que han analizado los datos de la COVID-19 en México han corroborado que los principales brotes han sucedido en zonas urbanas y que su letalidad ha sido mayor en zonas de alto hacinamiento.

De hecho, al menos tres estudios muestran que la epidemia ha sido menos letal en las zonas en las que se quiere vacunar primero.

Primero, el Coneval ha mostrado por medio de su “ Visor Geoespacial de la Pobreza ” que 9 de cada 10 casos activos por COVID-19 se presentan en personas que residen en zonas metropolitanas. En cambio, en los municipios más remotos el virus a veces no ha ni llegado. El mismo Coneval ha mostrado que los únicos 159 municipios donde no se ha registrado un solo caso de la COVID-19 en su mayoría se ubican “en regiones montañosas con baja densidad de población y con más de la mitad de su población con accesibilidad muy baja o baja a carretera pavimentada”.

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Segundo, el Conacyt ha reiterado en su más reciente “ Reporte de Vulnerabilidad ” que en general “los municipios más vulnerables son municipios con muy pocos casos o sin casos” de la COVID-19. Es decir, la COVID-19 no ha llegado a los lugares que tienen mayores tasas de pobreza, sino que se ha concentrado en zonas urbanas donde hay tasas de pobreza más moderadas. Por ello, el 81% de los municipios indígenas no han registrado casos de la COVID-19.

Tercero, otros estudios de datos han mostrado que el hacinamiento es uno de los aspectos que más se correlacionan con altas tasas de letalidad por la COVID-19. De hecho, mientras que en el 10% de los municipios más hacinados de México, 13 de cada 100 personas que adquieren el virus mueren, en los municipios menos hacinados, solo mueren 8.

Nótese que el hacinamiento no es exclusivo de zonas urbanas. Sin embargo, dado que las zonas urbanas han sido los lugares con más casos, el hacinamiento urbano (y no el rural) ha sido más letal en México.

Muchos han atribuido la decisión de vacunar primero en zonas remotas a motivaciones electorales. No le veo lógica a esto. De hecho, si el gobierno quisiera obtener más votos se centraría en zonas urbanas y semi-urbanas donde hay más votos.

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Yo creo que la razón por la que han decidido comenzar en zonas remotas es más simple y llana: una interpretación equivocada de un estudio de la UNAM. Su meta es atender primero a los ultra-pobres y por ello están decidiendo desatender a otros pobres. Probablemente, quieren proteger a los ultra-pobres porque, si bien por ahora éstos no están siendo afectados, en el momento en el que lo sean, su situación será muy mala.

Entiendo el razonamiento, pero me parece errado.

El gobierno le está dando prioridad a resolver un riesgo hipotético en vez de uno real. Es decir, están privilegiando resolver un problema que no está pasando (contagios en zonas remotas) y por ello están evitando resolver uno que sí esta pasando (contagios en zonas urbanas, pobres y hacinadas).

Ojalá cambien el curso.

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Nota del editor: Las opiniones de este artículo son responsabilidad única de la autora.