Publicidad
Publicidad

#LaEstampa | Cientos de balas en una declaración de guerra

La violencia en México ha visto horrores tan espantosos como este, pero nunca en ese sitio y de esa manera y contra una persona como García Harfuch.
jue 02 julio 2020 11:59 PM
(Obligatorio)
El vehículo del secretario de Seguridad de la CDMX revela el tipo de ataque contra García Harfuch.

Parece una zona de guerra, pero en realidad es las Lomas de Chapultepec. Ahí, arrumbado sobre el pavimento de una de las intersecciones más transitadas de la capital mexicana, está el cascarón de un monstruo blindado. Es la camioneta de Omar García Harfuch, cuyo blindaje, digno de un conflicto armado, le salvó la vida al hombre fuerte de la policía capitalina.

Hay que mirarla bien, con sus cientos y cientos de agujeros de bala, con los gruesos cristales a punto de reventar, con las llantas tronadas, como un elefante acribillado.

Publicidad

¿Qué es esta escena sino la imagen de una declaración de guerra? La violencia en México ha visto horrores tan espantosos como este, pero nunca en ese sitio y de esa manera y contra una persona como García Harfuch. Hay que imaginar, por un momento, el calibre de soberbia criminal, el descaro asesino que supone ordenar a un escuadrón de matones emboscar al jefe de policía de la ciudad más grande de México justo al principio de un día laboral en una zona como esa.

En el teatro de la mafia no hay casualidades. El Cártel Jalisco Nueva Generación quería matar a García Harfuch primero e incendiar su vehículo, con el cuerpo adentro, después. No hay que perder eso de vista: el último objetivo. Que no lo hayan logrado (obra de un milagro, sin duda) no debe distraer de la escena de terror que la organización criminal buscaba esa mañana en la capital.

No se trataba solo de robarle la vida a García Harfuch, acto terrible de por sí. Se trataba, idealmente, de mostrarle a toda la capital de México y al resto toda la furia del grupo criminal más poderoso del país, el que tiene, quizá, el ejército ilícito más grande y poderoso de nuestra historia.

Publicidad

Era, sí, una declaración de guerra. Y ante ese cascarón, y ante la muerte de los escoltas, y ante el cuerpo de la inocente Gabriela que murió en el fuego cruzado, y ante las heridas de García Harfuch, y ante el arsenal que los sicarios dejaron tras de sí… ante todo eso, ¿cómo responderá el gobierno de México? Vaya prueba.

El secretario de Seguridad de la CDMX sufre atentado

__________________

Nota del editor: Las opiniones de este artículo son responsabilidad única del autor.

Publicidad

Newsletter

Los hechos que a la sociedad mexicana nos interesan.

Publicidad

MGID recomienda

Publicidad