Nunca se había tenido una corporación así para la seguridad pública. Si esa institución se deja, como pasó con la Policía Federal, en (la Secretaría de) Gobernación, en la Secretaría de Seguridad Pública, se va a echar a perder,
Andrés Manuel López Obrador, presidente
Durante su conferencia de prensa diaria, el mandatario federal celebró el anuncio que Sheinbaum hizo este domingo, en el que prometió continuar con la política de seguridad de López Obrador y consolidar el traspaso de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
“Me dio mucho gusto que ayer la presidenta electa planteó, porque es lo más conveniente para garantizar la seguridad pública, el que la Guardia Nacional dependa de la Secretaría de la Defensa”, declaró en Palacio Nacional.
A pesar de que esa iniciativa ha sido criticada por organizaciones civiles, activistas y políticos de oposición porque abriría la puerta a una militarización de la seguridad pública, Sheinbaum propuso retomarla a partir del 1 de octubre, cuando asuma la Presidencia de la República.
López Obrador negó que dejar la Guardia Nacional en manos del Ejército signifique militarizar el país y acusó que ese argumento fue utilizado por la oposición para no aprobar sus reformas constitucionales.
Desde que impulsó esa reforma, el presidente ha justificado que un modelo similar funciona en otros países, como España y Francia. Ha explicado, además, que es la mejor acción para evitar que la Guardia Nacional se corrompa, como considera que ocurrió con la extinta Policía Federal.