En la reunión que sostuvo el presidente Andrés Manuel López Obrador con Claudia Sheinbaum, precandidata presidencial de Morena, no se abordaron temas partidistas, sino cuestiones personales, aseguró el mandatario federal.
“Tenía interés en platicar conmigo. Comentamos algunas cosas de cómo le ha ido, somos amigos. Además, es mi compañera, es la dirigente del movimiento al que pertenezco”, indicó.
Durante el encuentro, que se realizó en Palacio Nacional, tampoco abordaron la propuesta de reforma al Poder Judicial ni le ofreció consejos para su campaña electoral, aseveró el mandatario federal.
Tampoco platicaron de la situación del excanciller Marcelo Ebrard, quien compitió contra Sheinbaum por la precandidatura presidencial de Morena y denunció irregularidades en el proceso de selección. Incluso, se consideró que Ebrard renunciaría al partido o sería el candidato a la presidencia de México por Movimiento Ciudadano. Sin embargo, el excanciller declaró tiempo después que se quedaría en Morena tras llegar a un acuerdo con Sheinbaum.
–¿Hablaron de Marcelo? –preguntó una reportera.
–No, no, no. Yo ya de eso no hablo –respondió López Obrador.
Según el presidente mexicano, recibir a Sheinbaum en Palacio Nacional no afecta la equidad en la contienda electoral de 2024, a pesar de que en este momento se llevan a cabo las precampañas.
“Es que ella es la dirigente del movimiento, pero también es mi amiga y es mi compañera. Es una visita que no tiene nada que ver, aun cuando se dé aquí, con cuestiones partidistas”, sostuvo.
A decir de López Obrador, el encuentro fue una reunión de dos viejos amigos, donde Sheinbaum le contó del documental que publicó sobre su vida y prometió enviarselo.
“La estimo muchísimo. ¿Y de qué estuvimos hablando? De nuestra situación familiar”, reiteró.
El presidente agregó que no tiene que estar separado de Sheinbaum porque sus adversarios políticos los vinculen y lancen ataques contra él para supuestamente afectar la campaña electoral de la exjefa de Gobierno de la Ciudad de México.
Dijo, además, que dejará de reunirse con ella solo si las autoridades electorales se lo prohíben.
“No me estoy pronunciando en favor de que la gente vote por ella, eso no lo voy a hacer, pero sí es mi amiga e integrante del movimiento al que pertenezco", apuntó. "Si (las autoridades electorales) me pidieran que yo no reciba a nadie, pues también lo cumplo", agregó.
López Obrador aplaudió que Claudia Sheinbaum, precandidata de Morena, declarara que, de ganar la presidencia de la República en 2024, se sometería a la revocación de mandato durante su tercer año de gobierno.
“Es algo muy importante, ya está en la Constitución: las autoridades pueden someterse a la revocación de mandato. Qué bien que Claudia apoya ese método y ojalá y todos se sometieran”, declaró.
A decir del mandatario federal, esta figura abona a fortalecer la democracia en México que, considera, todavía no se consolida en el país.
“Apenas empieza a haber democracia, porque lo que imperaba era la antidemocracia, el fraude y la imposición. Tenemos que ir hacia adelante, consolidar la democracia. Democracia como forma de vida, no solo como forma de gobierno”, mencionó.
Recordó que él mismo se sometió a una consulta sobre la revocación de su mandato que, aunque no fue vinculante, resultó sintomática: le permitió comprobar que, según los resultados del ejercicio, la mayoría de la población lo apoya todavía.
“Sí celebro esto de que se establezca lo de la revocación de mandato”, subrayó el presidente.
