Los cambios que ha hecho en la SEP
Desde febrero de 2021, Marx Arriaga pasó a encabezar la Dirección de Materiales Educativos de la SEP.
En febrero de 2022, la SEP presentó el nuevo Plan de Estudios para la educación preescolar, primaria y secundaria, basado en el paradigma educativo de la Nueva Escuela Mexicana. Fue así que Marx Arriaga se encargó desde entonces de la reelaboración de los 18 libros de texto gratuitos de la primaria.
En agosto de 2022, Arriaga Navarro informó que más de 30 instituciones federales estaban involucradas en la elaboración de los nuevos Libros de Texto Gratuitos de primaria.
La SEP llevaría cabo todo un año de pilotaje en los estados para evaluar la pertinencia de dichos materiales, así como de los programas de estudio, a fin de que en el ciclo escolar de 2023-2024 empezara la implementación a nivel nacional.
Apenas este 8 de agosto, Arriaga Navarro sostuvo que 1,998 docentes también participaron en la creación de los libros de texto, derivado de una convocatoria abierta en la que podían participar todos aquellos que quisieran.
Además, aseguró que dentro de las acciones para el rediseño de los libros, la SEP realizó 32 asambleas nacionales donde se integró el diagnóstico del plan de estudios y cómo debería ser la familia de libros de texto, tomando en cuenta el desarrollo histórico de los libros y tomando en cuenta los resultados de 925 evaluaciones.
Y aunque el funcionario reconoció que los libros de texto gratuitos sí tienen errores, declaró: "yo no les diría errores, yo les diría áreas de oportunidad".
¿Marx Arriaga dijo que leer es capitalista?
En julio de 2021, Marx Arriaga también estuvo en medio de la polémica luego de que declaró que “leer por goce es un acto de consumo capitalista”.
En una conferencia en la Escuela Normal de San Felipe del Progreso, del Estado de México, el funcionario aseguró que quienes leen por diversión, lo hacen porque el mercado pretende generar en ellos “ideas de consumo” y son personas “automatizadas que no cuestionan su entorno”.
Marx Arriaga arremetió también contra los amparos de padres de familia, interpuestos para detener la reimpresión de libros de texto gratuitos, por lo que llamó a la lectura como una acción emancipadora.
Tras la polémica que sus declaraciones desató, el funcionario precisó que la plática no iba en ese sentido, sino sobre cómo fomentar la lectura en un espacio formal de educación y que "el placer por la lectura en una situación que lleva en segundo o tercer orden", ya que en el proceso didáctico de aprendizaje del estudiante, el placer no es un acto inmediato sino que implica un compromiso del lector.