De la Torre, hoy presidenta del Tribunal Superior de Justicia del estado de Durango y exdiputada federal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), estuvo en el centro de la polémica, pues su propuesta estuvo a punto de romper la coalición Va por México, que une al tricolor con el Partido Acción Nacional (PAN) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD), quienes acusaron al priismo de favorecer la militarización del país.
En entrevista con Expansión Política, hace un balance de lo que se consiguió con esa reforma constitucional, pues reconoce que la inseguridad sigue en niveles altos y aún hay compromisos que no se cumplen.
Entre ellos, apuntó, se requiere “un fondo nacional fuerte” para fortalecer a las policías de estados y municipios y formación civil profesional para la Guardia Nacional.
“La segunda etapa que ya debiera estar avanzando, la Guardia Nacional en una auténtica formación civil (…) pero no vamos a llegar a la implantación si no se avanza en una auténtica formación de policías civiles”, apuntó.
¿Cómo se ha implementado la reforma? Apenas comenzarán los trabajos de la Comisión Bicamaral, lo cual se ordena en la Constitución para dar seguimiento.
Yo creo que es un tema que se tiene que ir desdoblando. Cada día ha quedado más claro que el Ejército es importante que siga colaborando en las tareas de seguridad pública y que paralelamente sí tenemos que trabajar en fortalecer la seguridad pública con capacitación, la formación de la Guardia Nacional desde la visión civil.
Ojalá pronto se pueda llegar a crear el Colegio de Formación Civil Profesional para toda la Guardia Nacional. Yo creo que este grupo de trabajo (bicamaral) tiene una gran tarea que hacer y ojalá que pronto se puedan ir viendo resultados.
Paralelo a esto también tiene que seguirse avanzando en los recursos. Un policía bien pagado, donde su familia tenga la certeza de que si llega a fallecer en funciones y defendiendo la ciudadanía tendrá una buena pensión y que sus hijos van a estudiar, son los primeros que no van a permitir que se corrompan.
Es necesario darle a las policías municipales y a las policías estatales mejores sueldos, más capacitación, formación y seguir avanzando en la implantación de la Guardia Nacional, ese es el tema, porque estamos ciertos que en un año más (2024) pues nunca hubiera estado listo para salir el Ejército (de las tareas de seguridad), hay que ver nada más cómo está el país.
Hay todas las condiciones de seguir avanzando (pero) se requiere un fondo nacional fuerte para las policías municipales y estatales y tiene que haber recursos de la Federación, fue un compromiso que quedó, que fue público.
Si hay algo más de recursos, hay que reconocerlo, pero se tiene que ir desdoblando para poder llevar a cabo la implantación de la Guardia Nacional con su naturaleza esencial civil.
La Comisión Bicamaral ordenada por la reforma debe valorar avances con criterios cuantificables y en un mes se rinde el primer informe. ¿Cómo ve lo que pasó en Tamaulipas, el ajusticiamiento de jóvenes a manos del Ejército, el espionaje a un defensor de derechos humanos?
Creo que tenemos que seguir avanzando y que hoy requiere, de verdad, el mayor de los esfuerzos, quitarse de filias y fobias y poder ver bajo el interés nacional.
Desconozco los avances de la Comisión, pero sí tengo claridad de cuáles son los puntos en los que hay que avanzar y es muy importante fortalecer la capacitación civil de la Guardia Nacional. Hay que conocer tácticas policiales de investigación, derechos humanos, cuestiones procesales, penales, civiles.
Y esta es la segunda etapa que ya debiera estar avanzando la Guardia Nacional: en una auténtica formación civil, y bueno, entendemos que hay un modelo y etapas de implantación, pero no vamos a llegar a la implantación si no se avanza en una auténtica formación de policías civiles para esta coadyuvancia de la Guardia Nacional en la seguridad pública.
Y tienen que estar bien formados y capacitados, eso requiere tiempo, ojalá que lo podamos ver pronto.
Legisladores, sobre todo de oposición, dicen: bueno, allí en Tamaulipas se ve el ejemplo de que no hubo esa capacitación previa, esa formación en derechos humanos. ¿Diría que es solo un caso, que una golondrina no hace verano, que no hay esos errores en todo el país?
Yo creo que es parte del análisis. Yo creo que en todo el país tenemos una situación difícil y nos concierne a todos, cada quien desde su trinchera, porque lo que los ciudadanos esperan son respuestas.
Son muchos puntos en el país que podemos ver: Zacatecas, Durango. En 2009-2010 hubo una situación terrible, Zacatecas totalmente descompuesto, es nuestro vecino, nos preocupa mucho. Ojalá nada más fuera Tamaulipas, vemos otros estados complicados, por eso se requiere dejar filias y fobias con un gran sentido de nación, con una gran responsabilidad, sumar esfuerzos.
Yo creo que eso es lo más importante y con toda la humildad de los actores que tienen responsabilidad y poder, y sin filas y sin fobias ir dejando los temas electorales y los temas partidarios, eso no ayuda.
Hay que ver las notas todos los días y las redes sociales de lo que pasa. Yo sí tengo fe, esperanza y confianza en que se siga avanzando. Esta situación es una alerta, un llamado a todos los actores, no solamente el Legislativo, a los gobernadores, a la legislaturas locales, a los sistemas de seguridad estatales y nacional, a la sociedad y también a la procuración y la administración de justicia, que haya más capacitación, más garantías para que la gente pueda denunciar y ser más efectivos.
Por eso se promueve un nuevo Código Nacional de Procedimientos Civiles y familiares, pues eso abona a la justicia, a la paz y es un gran oportunidad de la prevención del delito. Estar bien en la sociedad, resolver los problemas familiares y conflictos abonan a la paz social.