En la segunda ronda de la megacompra participaron 172 proveedores, de los cuales 111 ganaron alguna partida y 61 quedaron fuera por no cumplir con requisitos técnicos, legales o porque sus propuestas económicas no fueron aceptadas.
Los medicamentos sin adquirir
Entre las 141 partidas que quedaron desiertas, 102 corresponden a medicamentos y 39 a material de curación. No se asignaron claves de fármacos controlados, psiquiátricos, terapias para cáncer, hipertensión arterial o problemas de sangre.
Por ejemplo, no se adquirió Lidocaína en gel de 20 mg, en su presentación de envase con 10 ml. Se trata de un anestésico local para el dolor de boca o de garganta irritada por la quimioterapia.
Tampoco se consideró la Terbutalina en solución inyectable de 0.25 mg, un tratamiento usado para el asma; ni tabletas con 10 mg de propranolol, recetadas para el control de la hipertensión arterial, y tabletas de 2.5 mg de Bromocriptina, para la enfermedad de Parkinson.
Las autoridades dejaron fuera de la licitación las grageas de 50 mg de Ciclofosfamida, un tratamiento contra el cáncer, y Vincristina en solución inyectable, usada también en casos de cáncer.
Sin comprar vendas, suturas y jeringas
En la segunda ronda de esta compra consolidada no se asignaron proveedores para surtir vendas inmovilizadoras de vidrio porque las propuestas no cumplían los requisitos solicitados, de acuerdo con el Acta de Fallo de la Adquisición Consolidada de Medicamentos y Material de Curación, Agentes de Diagnóstico y Otros Insumos.
Tampoco se adjudicaron las partidas de suturas sintéticas no absorbibles de polipropileno de 45 y 90 cm de calibre, porque las autoridades consideraron que los precios propuestos no eran aceptables.
En el caso de las jeringas de plástico grado médico para aspiración manual de 60 ml, el Insabi argumentó que no recibió “propuesta susceptible de valoración”.