El software, propiedad de la empresa israelí NSO Group, que en México operaba a través de la KBH TRACK, convertía a los teléfonos en micrófonos ocultos pues podía utilizar el micrófono y la cámara de los dispositivos infectados para realizar vigilancia.
Cuando una persona era atacada con Pegasus, se informó entonces, recibía un mensaje SMS en su teléfono, el cual contenía un texto con el que se buscaba persuadir a la víctima de hacer clic en un enlace infeccioso, haciéndose pasar por una noticia, un aviso o el mensaje de un familiar o amigo.
Pero ahora en los últimos casos y de acuerdo con R3D, el software Pegasus se ha sofisticado, pues ya no se necesita de un "clic" para que el spyware infecté los dispositivos de las víctimas.
"Las versiones más recientes de Pegsus utilizan vulnerabilidades de clic-cero (zero-clic) para sus ataques. Esto implica que ya no es necesario que el objetivo interactúe de ninguna manera –como hacer clic en un enlace o abrir un archivo– para lograr una infección del dispositivo”, detalló R3D.
En los últimos años se ha documentado que Pegasus aprovecha vulnerabilidades en aplicaciones móviles como WhatsApp para infectar teléfonos solo con una videollamada perdida.
Y una vez que Pegasus logra infectar un dispositivo puede acceder a prácticamente todo: los mensajes de texto, llamadas, aplicaciones de mensajería instantánea (incluso cifradas, como WhatsApp o Signal), libreta de contactos, correos electrónicos, notas, fotografías y, en general, archivos almacenados en el equipo.
Ahora también puede borrar cualquier rastro de la infección, volviéndose prácticamente indetectable.
La respuesta de AMLO
El presidente López Obrador insistió este martes en que su gobierno ya no realiza labores de espionaje.
“No es cierto que se espíe a periodistas o a opositores, no somos iguales a los anteriores, no es cierto. Yo hice el compromiso de que nadie iba a ser espiado, ningún opositor, si tienen pruebas que las presenten”, dijo al ser cuestionado.
Apuntó además que la Sedena sí realiza labores de inteligencia pero no de espionaje, esto para saber cómo enfrentar a la delincuencia organizada, porque –apuntó– es mejor la inteligencia y no la fuerza.
“Es que ellos tienen labores de inteligencia que llevan a cabo, que no de espionaje que es distinto. Nosotros no espiamos a opositores y lo que buscan nuestros adversarios es equipararnos con los que gobernaban anteriormente y no somos los mismos”, declaró.