El presidente López Obrador apuntó que, como parte de esa investigación, si bien hay ya varios presuntos identificados, será responsabilidad de la Fiscalía General de la República determinar qué otras autoridades pudieron incurrir en algún delito.
“Si la Fiscalía o los jueces determinan de que hay otros implicados, ellos lo van a decidir en absoluta libertad”, destacó.
De acuerdo con el presidente, a diferencia de otros episodios de la vida pública de México, ya no se permite que los crímenes de Estado queden impunes.
“Estamos ante una situación inédita porque se pensaba que quienes cometían delitos en nombre del Estado gozaban de impunidad y eso ya se terminó, eso era antes, ahora el Estado ha sido, ha dejado de ser el principal violador de derechos humanos, y es ese un cambio importante aunque no les guste a los conservadores y a los que apoyaban esas atrocidades, a los que apoyaban ese régimen autoritario y corrupto y que todavía lo están apoyando, porque todo esto se fue creando como un monstruo”, afirmó.
El mandatario federal insistió en que la investigación no cerrará. También rechazó que se justifiquen los hechos de violencia contra los jóvenes y se pronunció por la no repetición de los hechos.
“Nunca más estos hechos en el país, nunca más, independientemente del castigo y que no se quiera justificar bajo ninguna circunstancias a un crimen así, nada de que eran revoltosos los jóvenes, nada que supuestamente estaban involucrados en actos delictivos, nada de que se necesitaba un escarmiento, nada de eso, toda esa retacería de argumentos son ofensivos, no se puede actuar de esa manera”, refirió.