Todo inició en 2015 con un accidente de tráfico en el que Héctor Muñoz recibió un disparo en la mano cuando le reclamó al conductor del vehículo que lo impactó. Este personaje fue quien después declaró ante las autoridades que fue el otro hombre quien lo chocó y amenazó con un arma para intentar secuestrarlo.
El mismo hombre que acusó el intento de secuestro es hermano de una mujer de la tercera edad que fue víctima de secuestro solo unos días antes del incidente referido. Sin embargo, al testificar durante el juicio, la mujer declaró que no podía reconocer a ninguno de los hombres que le estaban presentando como sus captores.
Por estos hechos fueron detenidos Darwin Morales, Héctor Muñoz, Juan Luis López y Gonzalo García, —sin conocerse entre sí antes de las imputaciones—, quienes pasaron más de tres años en prisión, declarados culpables a pesar de la "duda razonable", aunque se les impuso una sentencia mínima.
En 2018, minutos antes de que los cuatro hombres lograron su libertad al cumplir el tiempo de la sentencia, la Fiscalía de Tabasco presentó una apelación y se les volvió a imponer una condena, ahora por 50 años, pese a que no existía ninguna prueba más allá del testimonio del otro conductor.
Solo Darwin logró salir de prisión porque su defensa probó que se encontraba en otro lugar en el momento de los hechos.
El 30 de diciembre de 2021, el presidente Andrés Manuel López Obrador, originario de Macuspana, dijo que estaban buscando que se repusiera el procedimiento.
Al respecto, el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, dijo que ya había investigaciones abiertas sobre funcionarios y exfuncionarios de la Fiscalía de Tabasco y que estaban a la espera de que la autoridad judicial emitiera una resolución.