De acuerdo con el Instituto Nacional de Migración (INM), entre enero y agosto de 2021, elementos de Grupos Beta del INM de la Secretaría de Gobernación han recuperado 46 cuerpos de personas migrantes que fallecieron durante su ingreso y tránsito por territorio mexicano.
De las causas, informó casos de ahogamiento (22 casos), accidentes, armas de fuego, problemas de salud, deshidratación en el desierto y asaltos. De los decesos, 37 correspondían a hombres, ocho mujeres y un menor de edad.
Una de las tragedias más recordadas es la de San Fernando, Tamaulipas, donde 72 migrantes fueron ejecutados por miembros del cartel de Los Zetas entre el 22 y 23 de agosto de 2010. Las víctimas de diversos orígenes en tránsito por México con rumbo a Estados Unidos, fueron asesinadas por la espalda, y sus cuerpos fueron apilados y abandonados a la intemperie, lo que aceleró su proceso de descomposición. Según las primeras investigaciones, fueron asesinados luego de ser secuestrados.
La tragedia de San Fernando se sumó a los numerosos casos de migrantes encontrados en camiones de transporte en situación de hacinamiento y en malas condiciones, en su paso por México para llegar a Estados Unidos.
En conferencia de prensa matutina, el subsecretario de Seguridad Pública, Ricardo Mejía Berdeja, numeró una serie de casos, donde gracias al apoyo de la Guardia Nacional y las fuerzas de seguridad, se logró salvar vidas al rescatar migrantes que eran trasladados en condiciones infrahumanas.
Ejemplificó con el evento del 3 de diciembre en Tecamachalco, Puebla, donde se ubicó un tractocamión con una caja refrigerada acoplada que llevaba en el interior 205 personas migrantes. Esta situación fue presentada por la Fiscalía General de la República (FGR).