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¿Por qué López Obrador no ha querido reconocer el triunfo de Joe Biden?

La mesura del presidente se explica en que está consciente de que le quedan más de 60 días al gobierno de Donald Trump, quien ha mostrado una postura estridente con México, consideran especialistas.
jue 12 noviembre 2020 05:50 AM
AMLO Casa Blanca
En julio pasado, el presidente Andrés Manuel López Obrador viajó a Washington para reunirse con Donald Trump, lo que generó críticas al considerar inapropiada su visita en medio de una campaña electoral de Estados Unidos.

La decisión del presidente Andrés Manuel López Obrador de no reconocer el triunfo de Joe Biden en las elecciones presidenciales de Estados Unidos responde más a una actitud cautelosa para evitar alguna reacción de Donald Trump, que a un desaire al político demócrata, coincidieron especialistas.

En entrevista, los académicos señalan que la decisión de esperar del presidente mexicano no tendrá fuertes impactos en la relación bilateral entre México y Estados Unidos y tampoco en el congelamiento de temas clave para la administración de Andrés Manuel López Obrador.

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Para el profesor del Centro de Estudios Internacionales de la UNAM, Ignacio Martínez, la mesura de Andrés Manuel López Obrador se explica en que aún le quedan más de dos meses a la administración de Donald Trump, con la cual si bien hubo respeto, también una postura estridente y advertencias hacia México.

“Todavía estamos expuestos a la diplomacia de Twitter que ha implementado Trump por estos cuatro años. Aquí está la cautela de López Obrador, en esperar por lo menos al 6 de diciembre cuando es la fecha para recibir todos los votos”, compartió.

Aunque el presidente Andrés Manuel López Obrador ha resaltado que la relación con su homólogo se ha dado en el marco del respeto y la no injerencia, desde antes de ganar las elecciones de 2016, Donald Trump se lanzó contra los mexicanos. Los calificó de "violadores", amenazó con la construcción un muro (que ya se edifica) en algunas partes de la frontera compartida e incluso propuso imponer aranceles a artículos mexicanos, por lo que México tuvo que aceptar "de facto" ser un "tercer país seguro" y frenar la migración centromericana.

Estados Unidos logró la cooperación de México, la cual se reflejó en la disminución del flujo migratorio centroamericano de 74% al pasar de 144,116 a 36,200 de mayo a diciembre de 2019.

Del otro lado, López Obrador ha agredecido a Donald Trump el ayudar a tener acceso a ventiladores para enfrentar el COVID-19 y que le haya ofrecido que Estados Unidos absorbiera la baja de la producción de barriles de petróleo que se le pedían a México por parte de la Organización de Países Productores de Petroleo (OPEP).

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De acuerdo con los expertos, ahí podría estar otra explicación de que frente a la inminente derrota de Donald Trump, López Obrador ha afirmado que prefiere esperar a que sean las autoridades de esa nación quienes declaren ganador al demócrata.

“¿Por qué esta postura? Porque queremos que en los asuntos nuestros no haya injerencia extranjera. México es un país independiente, libre, soberano. Entonces, no estamos a favor de ningún partido en Estados Unidos”, dijo López Obrador el pasado lunes, luego de citar el artículo 89 de la Constitución que establece que la política exterior debe guiarse por los principios de no intervención y de autodeterminación de los pueblos.

La postura del presidente le valió críticas en ambos lados de la fronter a, tanto de congresista demócratas como de la oposición en México.

De acuerdo con los expertos, el análisis que pudo hacer López Obrador, es que no felicitar a Biden cuando decenas de mandatarios y políticos del mundo lo hicieron , fue que no será tan costoso para México. El propio presidente ha descartado públicamente que su postura le genere represalias.

¿Qué le puede pasar a México en esa relación bilateral? Nada, nada que no tengamos en este momento”.
Ignacio Martínez, profesor del Centro de Estudios Internacionales de la UNAM.

Para el investigador del departamento de Estudios de Administración Pública de El Colegio de la Frontera Norte (El Colef), José María Ramos, sí o sí México y Estados tienen que tratar algunos asuntos conjuntamente, por lo que el hecho de que López Obrador no haya reconocido aún el triunfo del demócrata no generará una “situación muy tensa diplomáticamente hablando”.

Biden es muy diferente a Trump, entonces tiene sustancia la relación y no veo un ajuste de cuentas porque hay actores binacionales involucrados”.
José María Ramos, investigador de El Colef.

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Otro de los “desaires” de López Obrador hacia Biden fue haber viajado a Washington en julio pasado para reunirse con Donald Trump. Si bien se trató de una visita en su calidad de Jefe del Estado mexicano para reunirse con su homólogo, lo hizo en medio de un proceso electoral lo que se leyó como un apoyo hacia el político republicano.

Para el investigador de El Colef, tanto no haberse reunido con Biden en EU y el hecho de no felicitarlo, son asuntos que difícilmente dañarán la relación bilateral.

“Más allá de esos hechos que si bien son importantes y coyunturales, está la relación por sí misma y se pueden disminuir las tensiones o conflictos que pudieran darse. Ambos países nos necesitamos”, aclaró.

Con él coincidió el politólogo de la UNAM, Edgar Ortiz Arellano, quien dijo que a pesar del desaire que le ha hecho al presidente entrante Joe Biden, López Obrador podrá salir adelante con la política internacional, alertó que el partido del próximo presidente de EU sí podrá influir o presionar al mandatario estadounidense sobre cómo conducirse en la relación con México.

“El partido demócrata en realidad sí pudiese influir de manera contundente para que estemos en situaciones no tan ventajosas que de por sí con Donald Trump tampoco las tuvimos”, destacó.

Acercamiento con los demócratas

Aunque públicamente el gobierno de México decidió esperar a reconocer el gobierno que encabezará Joe Biden a partir del próximo 20 de enero, desde la Secretaría de Relaciones Exteriores a cargo de Marcelo Ebrard, deben ya estarse dando los acercamientos con quien será el presidente número 46 de Estados Unidos.

“Desde la Cancillería debe estarse tejiendo fino para tener un acercamiento con los demócratas. Sin duda la embajadora Martha Bárcena ya está teniendo acercamientos con el Partido Demócrata, Ebrard que tiene acercamientos con figuras latinas cercanas a Biden”, puntualizó Ignacio Martínez, quien también coordina el Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios (Lacen) de la UNAM.

De acuerdo con los especialistas, la agenda entre ambos países se centrará en la necesidad de una política bilateral más eficaz en materia de tráfico de drogas y en especial del fentanilo, migración, el T-MEC, el trasiego de armas, e incluso por la posibilidad de promover un Plan para el Desarrollo Integral de Centroamérica.

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