Los datos exhiben una ciudadanía resiliente, capaz de enfrentar situaciones adversas, recuperarse y transformar esa realidad.
Durante 2023, las solicitudes de contención emocional al Consejo Ciudadano de la Ciudad de México crecieron 13 por ciento con relación al periodo enero-noviembre del año anterior.
Un incremento revelador de mayor interés por el bienestar psicoemocional, mayoritariamente expresado por mujeres –en un 74 por ciento de las atenciones– y jóvenes de entre 18 y 30 años.
Aún está pendiente romper estigmas inhibidores para la expresión de las necesidades emocionales de los hombres, como considerar débiles a quienes piden ayuda.
Pensar a la salud emocional como un derecho con la misma importancia de la salud física se ha extendido por toda la República. El 47.6 por ciento de las peticiones de ayuda psicológica son de la Ciudad de México, pero 41.2 por ciento de otras entidades, entre ellas, Estado de México, Jalisco, Puebla, Veracruz y Guanajuato.
Las principales situaciones generadoras de conflictos emocionales están en el espacio familiar, relacionadas con violencia física o psicológica y problemas de diversa índole. Le siguen las rupturas de pareja.
El 20 por ciento de los casos atendidos en la Línea de Seguridad o Chat de Confianza, 55 5533 5533, son por ansiedad, depresión, desesperanza o dificultades en el manejo de emociones.
Pedir ayuda representa un aprendizaje, el saber que ninguna persona está sola. En el mundo, la Organización Mundial de la Salud estima que un 25 por ciento de la población ha enfrentado algún problema mental o emocional.
Una situación generalizada, como lo son el fraude o la extorsión en el ámbito de los delitos patrimoniales.