Oficialmente estamos en tiempos de definiciones, sorpresas y decepciones, muchas decepciones. El 20 de noviembre inician, ahora sí, las precampañas a nivel federal; desde el 5 de noviembre han comenzado en algunos estados las propias para definir candidaturas a las gubernaturas. Todos sabemos que los tiempos políticos no se ajustan a los electorales y que los partidos han ido definiendo sus candidaturas en sus propios tiempos, aunque le llamen de otra forma a los cargos que seleccionan.
#ApuntesElectorales | Precampañas y definiciones
En los próximos días se tendrán que decidir más de 20,000 candidaturas por parte de los partidos, cada uno ha seguido sus propios mecanismos para buscar ganar las elecciones y lidiar con los caprichos e inconformidades de sus huestes.
Morena ha optado por seleccionar cuatro o seis perfiles entre quienes miden conocimiento, popularidad y preferencias ciudadanas a partir de encuestas. El viernes en un larguísimo show fue anunciando uno por uno los resultados de sus encuestas a las gubernaturas y al final definió quienes buscarán la gubernatura en las nueve entidades y de paso quienes irán al senado en las mismas. No todos los que ganaron en las encuestas resultaron beneficiados con la candidatura, fue necesario hacer ajustes para cumplir con la paridad de cinco mujeres y cuatro hombres.
En el Frente Amplio por México ya definieron su candidatura presidencial, pero faltan las gubernaturas, a diferencia de lo que pasó en el proceso de selección de la persona responsable de la construcción del Frente, las definiciones de las cinco mujeres y los cuatro hombres tienen complejidades mayores, en primer lugar ya que entre los tres partidos deben negociar quién define la candidatura en cada entidad, según la fuerza política que tengan, los perfiles que aspiren al cargo y sin duda la competitividad. El rompecabezas es bastante más complicado y las definiciones tardan más en llegar. Seguro algo similar ocurrirá en el resto de las candidaturas, me refiero a las diputaciones, senadurías, diputaciones locales y ayuntamientos.
Movimiento Ciudadano (MC) es el único que propiamente ha iniciado con algunas precampañas, al menos en Jalisco y CDMX tiene precandidatos que, aunque son únicos dedicarán estos casi dos meses a promover sus aspiraciones para darse a conocer. MC ha sido un constante denunciante de la anticipación con la que las otras fuerzas políticas han tenido en la promoción de sus aspiraciones y perfiles. En el caso de la Presidencia de la República también habrá precampaña con un solo perfil. Lo que falta por definir es qué ocurrirá para el resto de los cargos, pues se sabe que el partido irá solo y tendrá que encontrar miles de perfiles para competir en el mayor número de cargos posibles.
Desde hace tiempo he señalado que armar el rompecabezas de las candidaturas será complejo, pues además de los tiempos políticos, las ambiciones personales y la búsqueda por competir y llegar al poder, hay que tener en cuenta otros factores como son la paridad y las acciones afirmativas que la autoridad electoral ya ha definido, pero también las rupturas, berrinches, inconformidades y oportunidades que se abran.
El 2024 es una elección fundamental, se juega la continuidad de un proyecto político y de un gobierno que genera mucha polarización, pues a muchos convence y otros repudian, también se define la capacidad de la oposición de plantar cara a una maquinaria electoral que en 2018 les pasó por encima y que lleva casi seis años preparando y afinando detalles para garantizar su continuidad y por qué no, hasta su hegemonía. De forma que la oposición tiene el enorme reto, en estos tiempos de definiciones, de buscar a las y los mejores perfiles, quienes sean más competitivos, pero sobre todo arroparlos y apoyarlos decidida y determinantemente para que ganen o de perdida evitar una derrota como la de hace casi seis años.
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