La reforma de 1953 para que las mujeres gozaran de una ciudadanía plena no fue una concesión, sino el resultado de una ardua lucha. El voto de las mujeres mexicanas significó el reconocimiento a la igualdad en la participación política y a partir de entonces ha continuado la lucha de las mujeres por sus derechos a participar en la toma de decisiones del país.
Es importante recordar y honrar las acciones de las mujeres que hicieron posible nuestra participación activa en la escucha efectiva de nuestra voz, pero también es una oportunidad para reconocer lo que nos falta por hacer para garantizar los derechos y la igualdad de oportunidades, así como para frenar la violencia política y las agresiones en cualquiera.
Más de cuatro generaciones de mujeres mexicanas han ejercido su voto, lo que más que un acto de justicia ha contribuido a reconfigurar la democracia, las instituciones del Estado mexicano y los espacios públicos.
En la coyuntura actual y ante el proceso electoral federal que se avecina, el INAI seguirá impulsando acciones para la apertura informativa en favor de la sociedad; sin transparencia, no habrá luz sobre aquellas situaciones que impiden el desarrollo de las mujeres.
Actualmente en nuestro país las mujeres hemos ganado terreno en la lucha por la paridad para ostentar cargos de elección popular, así como para dirigir instituciones u organismos clave para nuestra democracia.
Hoy en día suman ya 10 entidades de nuestro país las que son gobernadas por mujeres. El Banco de México, la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la Comisión Nacional de Derechos Humanos, el Instituto Nacional Electoral, Comisión Federal de Competencia Económica, así como el INAI, entre otros organismos, son encabezados por mujeres.