EL SHOW DE LOS INCENDIOS
El Domador de Palacio le ha dado una vuelta a su función mañanera y ha comenzado a dejar atrás lo que fueron tres años centrados en dar espectáculo acusando a viejos villanos: el PAN, el neoliberalismo, la corrupción, los conservadores… Ahora, la rutina en búsqueda de mantener los reflectores incluye a adversarios del extranjero, por ejemplo, criticar a una secretaria panameña un día, pausar la relación con el gobierno español al otro… o señalar los presuntos errores de políticos estadounidenses. Llama la atención que el Domador haya decidido recurrir a la estrategia de rociar gasolina y crear un Show de Incendios, –disputas internacionales– en varios frentes cuando México necesita fortalecer lazos comerciales para mejorar su economía. Para cirqueros y domadores que conocen las reglas de las relaciones exteriores, el mensaje del secretario de Estado, Antony Blinken, expresando “preocupación” por el alto número de periodistas asesinados en México no es uno más y su peso en la carpa de Estados Unidos debió tomarse en cuenta antes de calificarlo como “mal informado”. La receta simple para estos espectáculos es mantener la cabeza fría y alejados los bidones de gasolina del fuego.