Clase Media: Cualquier país en el mundo que se jacte de querer beneficiar a su población en cuanto a calidad de vida y mejora de perspectivas tendría que propiciar el crecimiento de sus clases medias. No es posible concebir un mejoramiento real sin que este sector social se multiplique. Y no obstante esta realidad, el Presidente se lanza en contra de estos grupos a quienes tilda de “aspiracionistas”. El país requiere más y no menos personas que tengan el deseo de superarse. Al Estado le corresponde dar las mejores condiciones de movilidad social. ¿Cómo se le ocurre entonces al Presidente vulnerar dicha evolución social?
Usar Presupuesto: Ante prioridades evidentes para el país en temas que hacen crisis todos los días, el gobierno federal persiste en dilapidar recursos, principalmente en los caprichos del Presidente. Lo increíble es que a pesar de las enormes señales de alarma en los rubros de salud, trabajo, seguridad, violencia, etc. no hay capacidad de reacción. ¿Hasta donde piensan llevar los daños antes de recapacitar?
Así vemos que el Presidente y su gobierno tienen su propia realidad, una en la cual las prioridades son dejar que los enfermos mueran, que los militares se vuelvan todo poderosos, que se consolide su pacto con los delincuentes, que se ataque a la disidencia, que se frustre a los que quieran mejorar, y que se acabe el dinero en sus caprichos. Por esto es que es claro que este gobierno se gana al adjetivo de criminal.
Y es que no exagero que son traidores a la patria y deberán eventualmente pagar por sus fechorías y abusos. No tarda el momento en que la población pierda la paciencia y empecemos a ver una mayor inconformidad y reclamos ante el engaño sistemático. Esperamos solamente que ese cambio inevitable sea sin violencia. Al tiempo.
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Notas del editor:
Juan Francisco Torres Landa es Miembro Directivo de UNE.
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