Publicidad
Publicidad

Irma Eréndira Sandoval: pieza clave de la elección 2021

La secretaria tendrá que decidir si apoya a AMLO como operadora o como funcionaria, lo que será clave en la elección de 2021, escribe Viri Ríos.
lun 17 febrero 2020 06:30 AM
Irma Eréndira Sandoval
La semana pasada, Sandoval presentó el Informe de Fiscalización 2019 de la secretaría a su cargo.

El éxito de Morena en 2021 dependerá medularmente de una decisión que tomará la secretaria de la Función Pública: Irma Eréndira Sandoval. La secretaria deberá decidir cómo apoyar a AMLO: en calidad de operadora o como funcionaria. Esta decisión es crítica. Determinará en gran medida el tipo de partido en el que se convierta Morena y el éxito de AMLO en la intermedia.

Irma Eréndira está en una posición delicada. Enfrenta un dilema que comienza a bosquejarse con claridad. A partir de este año, la secretaría a su cargo estará encargada de presentar informes que den prueba de la eficacia y legalidad de la administración pública. Ello implica que será su labor dar a conocer si algunos de los programas y de las acciones prioritarias del gobierno federal están incurriendo en irregularidades.

Ante esto, el dilema de Irma Eréndira es que puede decidir ponerse uno de dos sombreros. Y con cada sombrero apoyar a AMLO de manera distinta.

Publicidad

El primero es como funcionaria. Como tal, deberá seleccionar los casos de auditoría a fin de dar cuenta de presuntas irregularidades en toda la administración pública. De ser el caso, su labor será abogar por la reestructura o cancelación de programas prioritarios que cuentan con el favor del Ejecutivo. En casos extremos, la labor de la Secretaría de Función Pública pudiera evitar que los programas sigan adelante, retrasarlos o demandar que miembros de Morena sean investigados.

Con el sombrero de funcionaria, Irma Eréndira estaría apoyando a AMLO a dar resultados, a cumplir con los objetivos de su campaña, aun si no es con las herramientas que él pensaba.

El segundo sombrero es como operadora. Si toma este camino, Irma deberá buscar que los programas prioritarios sigan adelante, pues de ello dependerá que AMLO cumpla con sus promesas de campaña. Si bien los programas podrán tener irregularidades, su incentivo será a minimizarlos o a no investigarlos con tanto detalle como los creados por administraciones anteriores.

Con el sombrero de operadora, Irma Eréndira estará apoyando a AMLO a implementar su agenda de campaña, que no es lo mismo que dar resultados.

Lee: La SFP reporta 500 sanciones a funcionarios y multas a empresas por 1,400 mdp

Publicidad

La decisión que Irma tome es crítica y pondrá en jaque a uno de los dos grupos internos dentro de la “4T”: los “políticos profesionales” o los “puros”.

Si Irma Eréndira se pone su sombrero de funcionaria, estará entrando en coalición con los puros y en abierta lucha contra los políticos. Esta decisión convertirá a Morena en un partido de principios y convicciones donde la calidad de las políticas públicas y no la ambición electoral será paragón de sus acciones.

Si por el contrario se pone su sombrero de operadora política, Irma le habrá dado prioridad a los intereses de los políticos. Tendrá como prioridad que los programas sociales continúen sin retraso operativo alguno y permitiendo que Morena coseche electoralmente en favor de quien los recibe. Esta decisión convertirá a Morena en un partido de maquinaria electoral.

Una de las principales características de Irma Eréndira es su profundo respeto y absoluta lealtad a AMLO. Ello hace pensar a algunos que Irma no toma decisiones propias sino solo implementa lo que le dice AMLO. Esto es falso.

Publicidad

Irma, como otros secretarios de estado dentro de la “4T”, tiene mucha capacidad de decisión porque AMLO con frecuencia da instrucciones demasiado vagas e incluso operativamente contradictorias. Esto permite que Irma tome decisiones sobre qué implementar primero y cómo hacerlo.

En este caso, por ejemplo, las instrucciones de a) erradicar la corrupción desde la Función Pública y b) implementar los programas sociales tan rápido y ampliamente como sea posible son potencialmente contradictorias. En Irma recae fundamentalmente la decisión de cuál de ellas es más importante.

Hago votos para que Irma Eréndira decida erradicar la corrupción aun si ello requiere aparentemente retrasar el rápido despliegue de los programas sociales de AMLO. La alternativa es profundamente equivocada.

No se debe olvidar que la razón por la que AMLO ganó la elección en 2018 fue porque era el único candidato que tenía credibilidad para luchar contra la corrupción. La desaprobación de Peña Nieto provenía mayormente de los escándalos de corrupción de Peña Nieto. Anaya también fue presa de mucha desconfianza. El 65% de los votantes creyó que había lavado dinero, y de esos ocho de cada 10 votaron por AMLO.

Irma Eréndira será en parte responsable de que esa credibilidad de AMLO siga en pie.

__________________

Nota del editor: Las opiniones de este artículo son responsabilidad única del autora.

Recomendaciones

Newsletter

Los hechos que a la sociedad mexicana nos interesan.

Publicidad

MGID recomienda

Publicidad