Más de 80 involucrados en la desaparición forzada de los 43 estudiantes de Ayotzinapa han sido liberados por supuesta tortura durante el proceso judicial; pero, según el presidente Andrés Manuel López Obrador, varios de ellos no fueron torturados.
Durante su conferencia matutina habitual aceptó que el Protocolo de Estambul, utilizado para comprobar si una persona fue torturada, resultó negativo en algunos casos, aunque no detalló el número exacto.
“Alegando que fueron torturados, los jueces le han dado libertad a más de 80 personas y, de ese grupo, hay quienes no fueron torturados y sí participaron en la desaparición de los jóvenes, porque hay pruebas”, sostuvo en Palacio Nacional.
López Obrador explicó los implicados aceptaron su participación en la desaparición forzada del 14 de septiembre de 2014 y después denunciaron que lo habían hecho bajo amenazas y torturas.
“Está demostrado que no fue así, en algunos casos. Y luego, ellos mismos, como testigos protegidos, sostienen que sí participaron, que lo que declararon la primera vez es cierto, es real, está apegado a la verdad. Entonces, tiene que ver con un mal manejo, ya sea con malas prácticas, o tiene que ver con interés para proteger a implicados y desviar la investigación”, sostuvo.
López Obrador acusó que hay una supuesta manipulación del caso y señaló a organizaciones de derechos humanos de participar en ella.
“Estamos trabajando en eso, pero lo más importante es la búsqueda de los jóvenes porque ya sabemos que la investigación fue manipulada y tenemos sospechas de que hubo acuerdos políticos, incluso, que utilizaron o participaron conscientemente organismos de derechos humanos y los mismos abogados de los papás de los muchachos”, lanzó.
Según el presidente, esto se puede afirmar porque la sentencia del Poder Judicial que liberó a los implicados por sufrir tortura utiliza términos vinculados a los derechos humanos y no conceptos de un abogado constitucionalista.
“Los términos tienen que ver más con los que se usan en las organizaciones internacionales de defensa de derechos humanos. Entonces, cuando sale esta sentencia y liberan a los que presuntamente habían sido torturados, las organizaciones de derechos humanos y los mismos abogados celebran que se haya emitido esa resolución, que fue lo que permitió, en efecto, darles libertad a quienes habían participado”, insistió.
La acusación del presidente llega días después de que las familias de los estudiantes desaparecidos en Iguala, Guerrero, denunciaran que en este sexenio tampoco hay avances en el esclarecimiento del caso y tras varios ataques de López Obrador a las asociaciones que acompañan a las familias.
En los primeros días de marzo se registraron diversas protestas por la falta de resultados y en una de ellas los manifestantes tiraron las puerta de Palacio Nacional de la calle Moneda. Mientras que días después, un policía de Guerrero mató a un normalista que viajaba en una camioneta supuestamente robada.
Tras el clima tenso y distanciado de las familias, López Obrador prometió reunirse con las madres y padres de los normalistas.
Este lunes retomó el tema y agregó que, en próximos días, su Gobierno presentará un informe sobre los implicados que fueron liberados.
“Pero, independientemente de eso, que todo se va a aclarar, estamos trabajando en eso, lo que más nos interesa, lo que más nos ocupa, es encontrar a los jóvenes. Estamos trabajando día y noche en la búsqueda”, agregó.
El Protocolo de Estambul es el principal manual para la documentación y la investigación de los casos de tortura y fue adoptado por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Es el examen internacional más reconocido en la materia, pero las autoridades locales pueden aplicarlo sin la capacitación adecuada o en condiciones difíciles para documentar la tortura, por lo que será importante que el gobierno detalle las condiciones en las que se aplicó este Protocolo a los implicados en el caso Ayotzinapa.
