El medio de comunicación sostiene que el periodista Tim Golden buscó una postura del presidente de México sobre la posible contribución que recibió su campaña presidencial de 2006 a cambio de una promesa de que de llegar al gobierno, López Obrador presuntamente toleraría operaciones del Cártel de Sinaloa, sin embargo, no hubo respuesta.
“Hizo múltiples esfuerzos antes de la publicación del artículo para incluir la perspectiva de López Obrador. Contactamos con el vocero del presidente más de una semana antes de la publicación y le proporcionamos un resumen detallado de las conclusiones del reportaje y una serie de preguntas. Después de varias solicitudes, el vocero prometió una respuesta, pero nunca la recibimos”, afirmó Stephen Engelberg, editor en jefe del medio ProPublica.
Además rechazó que el periodista Tim Golden acudiera a la conferencia matutina, como solicitó el presidente López Obrador para cuestionarlo.
"Aunque quizás Golden disfrutaría el debate, no va a aparecer en la mañanera (...) ProPublica hablaría con López Obrador como con cualquier otro jefe de Estado—no para un episodio del segmento de la mañanera que él titula “Quién es quién en las mentiras?”, señala la publicación.
El pasado 30 de enero el medio de comunicación publicó el reportaje ¿Narcotraficantes canalizaron millones de dólares a la primera campaña del presidente mexicano López Obrador? En el que se revela que testigos dijeron a la DEA que la campaña presidencial de López obrador recibió una contribución del narcotráfico en 2006.
Desde ese día, el presidente de México ha acusado de calumnia, atacado al medio y al periodista Tim Golden y ha pedido que se presenten pruebas.
"López Obrador ha atacado a nuestro reportero Tim Golden. Golden no va a contestar preguntas en una conferencia de prensa de AMLO, pero aquí respondemos a algunas", dice el texto de respuesta tras los ataques del presidente mexicano.
La nota firmada por el editor en jefe señala que el reportaje se basó en entrevistas con funcionarios actuales y antiguos y la revisión de documentos oficiales, lo que reveló "la existencia de una investigación previamente secreta de la DEA sobre las supuestas donaciones a la primera campaña presidencial de López Obrador en 2006 por narcotraficantes trabajando con el llamado Cártel de Sinaloa" y detalla que el caso comenzó cuando un abogado mexicano del narcotráfico que estaba trabajando como informante dijo que en 2010 que había participado en la reunión en la cual las donaciones fueron negociadas, según funcionarios.