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“Los periodistas no hemos sabido cuestionar al poder”: Raúl Cortés

En su libro "El choque inevitable", el autor asegura que el presidente ataca a los periodistas porque cuentan una verdad que al mandatario no le gusta.
dom 05 marzo 2023 11:59 PM
Raúl cortes periodista
Raúl Cortés asegura que todos los días desde las mañaneras se dicen "bulos" (mentiras) para engañar a la gente.

“Nunca antes en México un presidente había logrado acaparar la atención de la opinión pública de forma tan contundente y frecuente como lo ha hecho Andrés Manuel López Obrador con su conferencia de prensa matutina diaria”, sostiene Raúl Cortés, en su libro El choque inevitable .

Desde el 3 de diciembre de 2018, López Obrador inició con las conferencias matutinas en Palacio Nacional, hasta la fecha ha ofrecido alrededor de 1,050 mañaneras, lo que lo convierte en el presidente que más ha hablado en el mundo; sin embargo, no por eso se ha convertido en el mandatario que más cuentas ha rendido, situación que se ha propiciado porque la prensa mexicana no ha sabido cuestionar al poder, asegura el autor del libro, quien ha seguido a detalle las mañaneras.

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En los 51 meses de su administración, López Obrador ha replicado el modelo de comunicación que instrumentó durante su paso por la Jefatura de Gobierno del entonces Distrito Federal (2000-2006), pero con un formato recargado: ahora expone temas durante más de dos horas, tiene secciones fijas, presenta invitados y hasta incluye una selección musical con sus temas a los que recurre frecuentemente.

Sin embargo, aunque se trata del único ejercicio en el mundo en el que un presidente se pone de lunes a viernes frente a un grupo de periodistas, en los cuatro años no se ha logrado el cometido: cuestionar al poder.

Cortés explica que esto se debe, en parte; porque el propio presidente no suele responder lo que se le pregunta; y también porque él utiliza ese espacio para hacer propaganda, para denostar a la prensa, para hablar de los temas que a él le interesan e incluso para “distraer” de los problemas relevantes en el acontecer nacional.

Otro elemento que destaca, es que una parte importante de los asistentes a las mañaneras no son periodistas, sino blogueros o activistas afines a su movimiento.

“Muchas veces me horrorizó al comprobar que en una mañanera no hay una sola pregunta sobre algún tema de actualidad que resulta muy trascendente para la ciudadanía; pueden ser cuestiones de la relación con Estados Unidos, temas de migración, temas de la deuda de Pemex, de la economía, de la inflación.

"Muchas veces, los youtubers preguntan sobre cosas que no tienen ningún tipo de trascendencia en términos de la actualidad y termina la rueda de prensa sin que él haya hablado de algo crucial; ni qué decirle temas de del narcotráfico o del crimen organizado”, critica el periodista.

¿Por qué no se ha podido cuestionar al poder si, de lunes a viernes, el presidente se presenta por más de dos horas ante la prensa? Es una pregunta con varias respuestas, explica el analista, entre ellas, alude, el formato de las mañaneras y los usos que el propio mandatario federal les da a las conferencias.

Cortés asegura que los periodistas tienen un papel fundamental para que el poder rinda cuentas y que, más allá del gobierno del presidente López Obrador, su rol es cuestionar al poder. Pero en el escenario actual, el presidente, agrega, los ataca porque cuentan una verdad que a él no le gusta.

“Los medios de comunicación tenemos un papel crucial en una democracia, nosotros somos los más preparados para pedirle al poder que rinda cuentas, para procesar qué nos da el poder, para trasladársela a los ciudadanos, para contextualizarla, para contrastarla y eso no se da”, advierte Cortés, un periodista nacido en España, pero por años ha trabajado en México.

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-¿Sirve que de lunes a viernes el presidente López Obrador se exponga al escrutinio de los periodistas en lo que él llama un diálogo circular?
El concepto de diálogo circular es utópico y es inadecuado en términos de lo que es un evento periodístico, de lo que es una rueda de prensa. Por definición, una rueda de prensa es cuando una autoridad que se pone frente a los micrófonos y atiende a las preguntas de los reporteros y las responde, eso no se da necesariamente en el salón de Tesorería de Palacio Nacional.

Muchas veces, la mañanera parece un evento de gobierno, con participación de autoridades públicas, mostrando los logros o supuestos logros del gobierno.

Cuando un reportero va una rueda de prensa tiene que hacer preguntas pertinentes, no tiene que expresar su opinión, no tiene que ponerse del lado de la persona a la que interroga, en este caso un presidente, y eso no se da.

Hemos visto durante meses y años la presencia de personajes que son youtubers, blogueros, son comunicadores, pero no son periodistas o tienen muy poca trayectoria periodística y además hay algunos activistas políticos que no favorecen el que haya realmente un ejercicio periodístico Palacio Nacional.

Los medios de comunicación tenemos un papel crucial en una democracia, nosotros somos los más preparados para pedirle al poder que rinda cuentas, para procesar que nos da el poder, para trasladársela a los ciudadanos, para contextualizarla, para contrastarla y eso no se da.

Aunque lo niega, el presidente suele estigmatizar a la prensa. ¿Qué tanto contribuye esto a la violencia contra los periodistas?

No sé si hay una relación tan directa, de causa-efecto, decir 'el presidente es corresponsable de los asesinatos de periodistas', pero sí, es verdad que cuando él ataca verbalmente a los reporteros, a los líderes de opinión, a los medios en general, está atacando a un pilar de la democracia y de alguna manera aquellos que quieren realmente callar las voces de la prensa, de los medios, encuentran un caldo de cultivo, un espacio en el que pareciera más favorable para ellos, el que cometan ese tipo de crímenes, lo cual es terrible.

La voz del presidente representa una gran responsabilidad y lo que dice tiene un gran valor en la sociedad, cuando él desprestigia a la prensa, de alguna manera favorece a que algunas personas se sientan empoderadas para para poder cometer actos contra la prensa.

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-¿Por qué el presidente critica a la prensa?
Como político, el presidente actúa en función de los réditos electorales de lo que dice y por tanto cuando habla y critica a los medios lo está haciendo porque quiere atacar a los medios porque los considera adversarios porque cuentan una verdad que a él no le interesa o no le gusta.

-¿Cómo debe ser la relación entre el poder y los medios de comunicación?
Yo siempre cito a William l. Rivers y su libro The Adversaries en el que plantea que la posición de los periodistas frente a los poderosos, a los gobiernos, mandatarios debe ser de la de adversarios, de enemigos prácticamente. Yo creo que no necesariamente tiene que ser así. Los medios de comunicación somos un filtro entre el poder y el ciudadano, pero también somos un portavoz, para las políticas públicas. Hay políticas públicas que son incorrectas y se tienen que denunciar, y por eso hay que hacer reportajes sobre la corrupción en el Estado, pero también hay políticas que so positivas y los medios de comunicación tenemos que informar sobre ellas.

Los medios de comunicación debemos evitar de no caer en la tentación, que se ha dado durante mucho tiempo en México, de ceder a las presiones de los poderes económicos y poderes políticos, eso le ha servido a López Obrador para alimentar su discurso contra la prensa.

-¿El presidente ha usado las mañaneras como distracción?

Sí. En 2020, sorpresivamente, el presidente anunció que iba a rifar el avión presidencial y que cualquier ciudadano podía iba a poder ganar esa aeronave que obviamente era un disparate porque quién va a poder quedarse o mantener o siquiera estacionar un avión en su casa. Ese es un ejemplo claro. Eso sucedió a principios del año 2020 en febrero justo cuando en el mundo empezaba a propagarse el coronavirus y empezaba a crecer la preocupación por lo que entonces, ya se intuía que podía ser una pandemia y acabó siéndolo, el presidente habló de rifar el avión.

El presidente busca distractores te temas que están totalmente fuera del interés de la opinión pública o de lo que importa en la actualidad informativa.

Yo que trabajo en agencias de noticias, muchas veces me horrorizó al comprobar que en una mañanera no hay una sola pregunta sobre algún tema de actualidad que resulta muy trascendente para la ciudadanía, puede ser cuestiones de la relación con Estados Unidos, temas de migración, temas de la deuda de Pemex, de la economía, de la inflación. Muchas veces los youtubers preguntan sobre cosas que no tienen ningún tipo de trascendencia en términos de la actualidad y termina la rueda de prensa sin que él haya hablado de algo crucial, no ni que decirle temas de del narcotráfico o del crimen organizado.

-¿Con las mañaneras el presidente está sentando un precedente en la forma de comunicar en el gobierno?

López Obrador va a dejar como legado especialmente esta forma de comunicar tan característica o esta forma de darle tanta trascendencia a la comunicación, no solamente por el tiempo que permanece hablando durante todos los días sino porque él es un gran publicista, es un gran creador y a veces este toma prestados muchos lemas del imaginario popular.

Algo importante, más allá de la figura del presidente, los medios de comunicación tenemos que subsistir y de muchos medios de comunicación tienen mucha historia, mucha trayectoria, muchos años de vida y llegará un día en que López Obrador dejará el poder, tal vez continúe la cuarta transformación, pero seguramente será diferente.

La forma de hacer comunicación política desde el gobierno seguirá subsistiendo y va a haber otros López Obrador en el futuro y lo importante aquí es que nosotros no perdamos el norte y sigamos haciendo nuestro trabajo, con rigor ético, rigor profesional.

-¿Por qué 'El choque inevitable'?
Inicialmente, quería titular este libro como ‘tengo otros datos’, que es una de las frases que para mí mejor define este fenómeno de la postverdad, no que no solo es característico de López Obrador, también lo es de (Donald) Trump, de (Jair) Bolsonaro, plasmado en políticos que tratan de lograr que la opinión pública se construya a partir de creencias personales, de sentimientos de afinidades o delante de los datos. Eso es grave porque los datos son la realidad.

Con la editorial llegamos este otro título “Un choque inevitable”, que al final también refleja lo que lo que se veía venir, que si había sido tan ríspida la relación de López Obrador antes de ser presidente, cuando denunció los fraudes de 2006 y 2012, era lógico que iba a haber un choque inevitable

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