El presidente criticó de nuevo a Carlos Zamarripa, quien lleva 13 años como fiscal de Guanajuato a pesar de que ese es el estado más violento del país con 2,115 homicidios dolosos, que representan el 10% de los registrados a nivel nacional.
“En el caso de los procuradores resolvieron ¿10 años? Promedio ocho años. El de Guanajuato lleva 14 y le faltan dos, entonces se les pasó la mano, o sea, es mucho", criticó.
López Obrador adelantó que él no planteará una reforma para disminuir el tiempo de un fiscal, pero sí consideró que se deben tomar decisiones a favor del estado. Comentó que hasta hace algunos meses, Jorge Winckler se mantenía como fiscal de Veracruz, pero tras su salida, el estado comenzó a mostrar resultados en materia de seguridad.
“Sale el fiscal o procurador y las cosas mejoran y se puede probar. El caso de Veracruz estaba mal, mal, mal, estado vecino de aquí de Tamaulipas, salió el procurador, desde luego hubieron otros cambios pero es notorio de que mejoró la situación de seguridad”, afirmó.
"Si no hay buenos resultados no puede haber impunidad, nadie puede ser absoluto en ningún nivel de la escala, nadie debe sentirse absoluto”, apuntó.
El presidente también criticó que los fiscales anticorrupción hayan sido nombrados en algunos casos por los propios gobernadores, pues advirtió que periodos tan largos “garantiza impunidad”.