Jiménez Espriú entregó su carta de renuncia al presidente López Obrador, con fecha del pasado 17 de julio, en la que lamenta no haber tenido éxito al momento transmitir su “convicción y preocupación” sobre la “grave trascendencia” que conlleva el darle el control de las aduanas y puertos a las fuerzas armadas
"Quiero expresarle que, como mexicano, sigo convencido de la impostergable necesidad de la Cuarta Transformación de la vida de la nación que usted encabeza, de su propósito de lograr una sociedad más equitativa a partir de la atención prioritaria a los pobres y de terminar con la terrible lacra de la corrupción que ha agobiado a nuestra nación, la que seguiré apoyando desde mi coto personal”, manifestó en el texto.
Esta renuncia se suma a la de Josefa González Blanco Ortiz Mena, de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos naturales (Semarnat), del 25 de mayo de 2019, y a la de Carlos Urzúa, de la Secretaría de Hacienda, del 9 de julio de 2019.
En los 19 meses que duró su gestión, Jiménez Espriú no tuvo a su cargo los proyectos prioritarios del gobierno federal como son la construcción del Aeropuerto de Santa Lucía, que realiza el Ejército, o la refinería de Dos Bocas, que coordina la secretaria de Energía, Rocío Nahle.
A esto se sumó la decisión del presidente López Obrador de dejar el control de los puertos y de las aduanas al Ejército y la Marina, una situación en la cual manifestó su inconformidad el ingeniero Jiménez Espriú.
“Le agradezco su comprensión, su respeto y su aceptación a mi decisión de separarme por este diferendo, esta discrepancia en relación a lo que ha mencionado. Para mí ha sido una gran satisfacción, usted debe saber en la carta que le envié que yo sigo siendo fiel y leal a los propósitos de la Cuarta transformación”, dijo Jiménez Espriú tras separarse del cargo.
