"México resaltará la importancia de ocuparse del uso último de las armas, más allá del usuario final; de controlar y salvaguardar los lugares de almacenamiento; de fortalecer los controles de exportación e importación; y de ampliar las sinergias entre los organismos internacionales y regionales ya existentes", precisa un documento difundido por la Cancillería.
El gobierno mexicano, a través del canciller Marcelo Ebrard, hará un llamado sobre la necesidad de atender esta meta (la 16.4) contemplada en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), pues, refirió, el tráfico ilícito de armas se lleva a cabo en conjunto con otros delitos.
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De acuerdo con la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) , de diciembre de 2018 al 5 de agosto de 2019, en el país fueron decomisadas 1,294 armas de fuego —807 cortas y 487 de grueso calibre—, 3,353 cargadores, 156,610 cartuchos, 41 granadas, dos lanzagranadas y un aditamento para lanzagranadas.
En este mismo sentido, México también presentará el proyecto para abordar y contrarrestar el problema mundial de las drogas, cuyo objetivo, según el documento, es priorizar el enfoque de salud pública y la visión preventiva.