Para el hoy decano de la Escuela de Ciencias Sociales y Gobierno del Tecnológico de Monterrey, las “mañaneras” de López Obrador son la principal forma de comunicación del gobierno actual, a pesar de que no se trate de un ejercicio real de rendición de cuentas, "sino de un método para fijar una agenda política y hacer propaganda gubernamental".
“En otros sexenios se trataba de ofrecer información muy puntual, precisa, sistemática y, desde luego, estar abiertos a cuestionamientos”, señala.
Recomendamos: La mañanera borró la estrategia
Durante las conferencias matutinas, opina, casi no se presentan datos concretos o información fidedigna y corroborable, ni mecanismos concretos de funcionamiento de la política pública.
“En el equipo del presidente López Obrador están confiados en que su estrategia funciona y una parte del propósito político es tenerlo todo el tiempo en los medios de comunicación”, expone. “Sin embargo, no es lo que mejor funciona y eso probablemente después sea costoso”.