Cada mica tendría un costo de 13.72 pesos y se estima que el año previo a las elecciones presidenciales de 2030 se llegue a un pico de fabricación de hasta 20 millones de credenciales de elector.
El contrato se firmará a principios de enero.
En reunión de la Comisión del Registro Federal de Electores, la presidenta de ese grupo, Carla Humphrey, requirió información específica y por escrito para conocer los tramos de responsabilidad que tendrá cada una de las tres empresas ganadoras.
Expresó que se requiere más información, incluso legal, sobre el sustento jurídico de la contratación de una empresa descentralizada adscrita al Ejecutivo Federal.
Aunque Talleres Gráficos de México está como aliada y la principal es otra empresa, se necesitan datos, dijo.
“Hay una preocupación porque una empresa desconcentrada pues del gobierno está ahora participando con la empresa que ganó la licitación y que eso pues ha generado un tema de preocupación y creo que tenemos que ser muy claros y generar la certeza y la transparencia”, comentó.
De lo que se trata, agregó, es de que las y los electores “tengan pleno conocimiento de que sus datos no podrán ser utilizados por nadie que no sea el INE".
También expuso que llama la atención que el compromiso era dar a conocer el resultado del fallo el 12 de diciembre y se adelantó dos días, además de que los consejeros se enteraron por un comunicado de prensa que, contrario a las normas internas, no fue consultado con los consejeros previamente.
Demandó además la respuesta a un análisis de riesgos del proceso de licitación de la credencial para votar que fue solicitado hace tiempo y sobre el cual no hay respuesta.
"(Hay) la preocupación por el manejo de los datos personales y creo que pues será mejor contar por escrito con este informe para que todas y todos podamos revisarlo, leerlo y, en caso de que haya algún cuestionamiento o alguna duda adicional, pues también tengamos la posibilidad de preguntarlo”, comentó Humprey.
El consejero Castillo también pidió a la Dirección Ejecutiva de Administración del INE explicar si efectivamente la asignación a un organismo público descentralizado de la Secretaría de Gobernación no representa riesgo para los datos personales de los ciudadanos.
En su observación, dijo, debe clarificarse también si no se verían afectadas la integración del padrón electoral y la Lista Nominal de Electores, así como la confidencialidad de sus datos.
Esta información sería útil para entender qué implica la participación de un organismo público descentralizado dependiente del Ejecutivo en las tareas de fabricación de las micas.
“Tiene que quedar muy claro cuáles son las responsabilidades o cómo se establece la distribución de responsabilidades entre las tres empresas que están involucradas en esta licitación”, dijo Castillo.
Luis Mena, representante del PRI en la Comisión del Registro Federal de Electores, recordó que esta sería la primera vez en que el gobierno entra (vía Talleres Gráficos de México) a fabricar las micas, pues al parecer no hay antecedentes.
“Nos preocupa mucho que una empresa de carácter descentralizado de la Secretaría de Gobernación sea quien, en conjunto con una empresa privada, vaya a producir la credencial”, comentó.
Morena en cambio, en voz de su representante Jaime Miguel Castañeda, se mostró preocupado, pero porque los requerimientos de información acordados en el seno de la Comisión retrasen el contrato.