Mario Marín Torres, exgobernador de Puebla de 2005 a 2011, salió de prisión la madrugada de este miércoles 14 de agosto para llevar su proceso en prisión domiciliaria.
Mario Marín, conocido como "el góber precisoso", fue detenido en Acapulco, Guerrero, el 3 de febrero de 2021, luego de que desde abril de 2019 se le consideraba prófugo de la justicia, pues en esa fecha un tribunal de Cancún giró una orden de aprehensión en su contra.
Mario Marín está acusado de tortura, abuso de autoridad y protección de redes de trata.
Las investigaciones en contra del exgobernador de Puebla iniciaron en diciembre de 2005, cuando Marín apenas llevaba 10 meses en el poder y pidió a la jueza Rosa Celia Pérez González librar una orden de aprehensión en contra de la periodista Lydia Cacho, por el supuesto delito de difamación y calumnia en agravio del empresario mezclillero de origen libanés Kamel Nacif, amigo del entonces gobernador.
Nacif fue mencionado en el libro de Cacho Los demonios del edén, en el que la periodista documentó un red de pederastia, donde describe además las fiestas presuntamente organizadas por el empresario en las que se cometía abuso de menores de edad, en contubernio con otros políticos, empresarios y extranjeros.
El 15 de diciembre de 2005, Lydia Cacho fue detenida en Cancún y trasladada vía terrestre por agentes comandados por Adolfo Karam Beltrán, entonces director de la Policía Judicial de Puebla.
Durante el trayecto, según lo denunciado por la periodista, fue torturada y amenazada con ser violada y asesinada. Ella quedó libre tras pagar una fianza de 106,000 pesos, pero el proceso legal en su contra duró más de un año
Cacho denunció a Mario Marín de tortura, protección de redes de trata y abuso de autoridad.
De acuerdo con el testimonio de la periodista Lydia Cacho, meses después de la publicación de su libro Los demonios del Edén en 2004, fue detenida por agentes de la Fiscalía de Puebla en Cancún, Quintana Roo, lugar en donde residía, bajo acusaciones de difamación y calumnia. La demanda fue interpuesta por Nacif.
Según la denuncia, durante el traslado por tierra desde Cancún a Puebla fue sometida a torturas para intentar acallarla y que desmintiera el contenido de su investigación.
La periodista fue exonerada de las acusaciones en su contra en 2006 y el 14 de febrero de ese año el periódico La Jornada publicó una conversación telefónica entre Marín y Nacif, en la que este último agradecía al “góber precioso” por haberle dado un !coscorrón” a Cacho.
”Quien comete un delito se llama delincuente”, respondía Marín, quien desde esa época asegura que no es él quien sale en la grabación.
Las investigaciones en torno al caso se mantuvieron estancadas, hasta que en 2018 el Comité de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) dictó una resolución en la que reconoció que la periodista fue detenida de forma arbitraria y que sufrió agresiones durante su arresto en 2005, por lo que dictaminó que el Estado mexicano debía procesar, juzgar y castigar "con penas adecuadas" a los responsables de esas agresiones.
13 años después de los hechos, el 10 de enero de 2019 el Estado mexicano ofreció una disculpa pública a Cacho, por fallar en su responsabilidad de proteger su libertad de expresión.
Tras haber sido detenido Mario Marín en Acapulco, Guerrero, en 2029, el exgobernador fue trasladado a Cancún, Quintana Roo.
En enero de 2023 fue trasladado al penal de máxima seguridad del Altiplano.
Este miércoles, Mario Marín llegó a su casa en donde permanecerá en prisión domiciliaria.
Custodiado por agentes de la Guardia Nacional, en un convoy de al menos tres patrullas, Mario Marín llegó alrededor de las 4:00 de la mañana de este 14 de agosto a su casa, en un fraccionamiento de Xilotzingo, en la ciudad de Puebla.
