“No están legitimados para hablar, ni siquiera para criticar”, dijo el senador Ricardo Velázquez, de Morena. “Los motivó el egoísmo y la ira” y no se presentaron, agregó por su parte Graciela Sánchez.
La senadora Laura Ballesteros, de Movimiento Ciudadano, advirtió que 18 de los 20 nuevos magistrados son “abogados del presidente” y algunos no tienen la experiencia de ocho años requerido; además de que, agregó, tienen prácticas de nepotismo y la mayoría enfrentarán “serio” conflicto de interés.
“Este Tribunal resuelve juicios promovidos por particulares en contra de los actos de la administración pública federal, vigila que el gobierno federal actúe apegado a la ley, por esta razón no puede haber personas con conflictos de interés con el gobierno en turno”, destacó la emecista.
“Son en su mayoría abogados del presidente. Son al menos 10 personas con un serio conflicto de interés, un militar y otros más con redes de nepotismo. Por eso les digo, si son iguales (…) la hija de la consejera jurídica, el fiscal general de justicia militar y el hijo del fiscal de Ayotzinapa, entre otros”, señaló.
Ballesteros recordó que la oposición no se presentó en la Primera Comisión de la permanente durante las entrevistas y la dictaminación de los perfiles pues la integran ocho legisladores de Morena, uno de Encuentro Social (PES), otro del Verde y uno más del Trabajo.
“Fue un agandalle”, dijo el panista Héctor Saúl Téllez: "La presidencia se ha convertido en la mejor agencia de colocación de sus amigos”.
María de los Ángeles Gutiérrez, también del PAN, evidenció que solo cuatro de los magistrados nuevos son idóneos pues provienen del Servicio Profesional Judicial.