El objetivo del presidente, alertan los expertos, es incidir en la resolución de asuntos clave sobre las obras insignia del sexenio, como el Tren Maya, la Refinería de Dos Bocas, el Aeropuerto Felipe Ángeles (AIFA), la megafarmacia y muchos otros, pues este Tribunal resuelve sobre la legalidad de licitaciones y contratos federales.
También resaltan que al TFJA le corresponderá atender procedimientos de responsabilidades administrativas de funcionarios, como las irregularidades en el emblemático caso de Selgalmex, y entre sus facultades está la determinación de montos resarcitorios derivados de daños al erario detectados por la Auditoría Superior de la Federación (ASF), así como juicios promovidos por el Sistema de Administración Tributaria (SAT) por el pago de impuestos.
Por eso, con perfiles cercanos se prefigura la “morenización” de la justicia en materia administrativa, pues en receso la decisión sobre los nuevos magistrados la tomará la Comisión Permanente del Congreso y bastará mayoría simple.
Morena, al viejo estilo
Itzel Checa Gutiérrez, coordinadora general del Observatorio Designaciones Públicas, que promueve Artículo 19 y Fundar, Centro de Análisis e Investigación, expone que la búsqueda de capturar a las instituciones no es exclusiva de Morena, pero este partido había ofrecido cambiar las cosas.
“Y no sólo no fue así sino que se agravaron las cosas: insisten, como otros en el pasado, en nombrar cuotas y cuates, pero además se profundiza la falta de acceso a la justicia y la ausencia de organismos con independencia porque en muchos casos ni designa a sus integrantes y eso afecta a las instituciones en el ejercicio de sus facultades”, refiere.
“Al final vemos que la 4T sigue reproduciendo este intento de captura. A través de varias modalidades que se vieron con claridad en 2023: no designar y dejar las instituciones incompletas como un acto de deliberado para ir reduciendo sus funciones”.
La otra modalidad es remitir propuestas con militancia o cercanía partidista:
“(Ellos dicen: 'Es bueno porque están con el proyecto de la llamada 4T', pero esto que es sumamente cuestionable porque lo que necesitamos y lo insistimos desde el pasado son perfiles idóneos, que no sólo conozcan el marco legal sino que tengan experiencia en la materia las dos son cosas son indispensables para la independencia judicial”, indica.
Ese es el caso del TFJA, en el que el jefe del Ejecutivo Federal había mostrado cierto desinterés, pues no había remitido al Senado de la República sus propuestas de magistrados para cubrir las vacantes, que hasta el año 2023 se llegaron a acumular 71 magistraturas pendientes de designación.
De acuerdo con el presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) Eduardo Ramírez, consultado sobre los cargos pendientes de designar, de 71 vacantes, 20 magistrados impugnaron el procedimiento –pues tenían derecho a ser ratificados en el cargo– de ahí que se optó por realizar 52 procesos de designación.
Sin embargo, en junio, noviembre y diciembre el presidente López Obrador envió al Senado listados, luego los modificó y finalmente en este mes de enero 2024 remitió 20 nombres de personas propuestas para una magistratura que ya fueron entrevistadas y está pro dictaminarse sobre su idoneidad.
En su primer paquete de propuestas el presidente envió propuestas como a Susana Mercado Alvarado –quien también fue promovida en 2023 como aspirante a consejera del INE– exasesora en el Senado y coordinadora de asesores en la Coordinación de Comunicación Política de Morena en la Cámara de Diputados, bajo las órdenes de la vocera de ese partido y diputada, Andrea Chávez.
También propuso a Arturo Torres Martínez, titular de la Unidad de Servicios Operativos y Logísticos de Tabasco –cuando fue gobernador el exaspirante presidencial Adán Augusto López- o a Maday Merino, exconsejera presidenta del Instituto Electoral de Tabasco.
Sin embargo, ahora los nuevos perfiles propuestos provienen directamente de áreas del gobierno en las que se tomaron decisiones sobre las que el TFJA deberá resolver en un futuro próximo.
Por ejemplo, se envía a perfiles que están en funciones de la Consejería Jurídica de la Presidencia de la República, exfuncionarios involucrados en la extinción del Seguro Popular y creación del Insabi –ya extinto–, también relacionados con el traspaso del Tren Maya del Fondo Nacional del Turismo (Fonatur) al Grupo Aeroportuario que administra la Defensa Nacional (Sedena) o exasesores del Instituto Nacional de Migración (INM) cuyo titular, Francisco Garduño, enfrenta un proceso administrativo y penal.
Para la especialista Itzel Checa, este tipo de trayectorias genera dudas de que la actuación de los prospectos no sea imparcial.
“Y eso tendría que ser razón suficiente para que en este caso no transitaran las propuestas, pero en todo caso la Comisión Permanente o el Senado en un ejercicio de control legislativo debería revisar esos perfiles con profundidad y rechazarlos”, razona.