“Nosotros somos muy positivos porque hicimos modelajes de qué iba a pasar con el etiquetado y sugieren que va a haber una reducción en cinco años de la prevalencia de obesidad”, detalló Barquera, actual presidente electo de la Federación Mundial de Obesidad.
Aunque después del confinamiento por la pandemia de Covid-19 se observó un ligero aumento de sobrepeso y obesidad en algunos grupos poblacionales, el doctor Barquera sostuvo que no es un incremento significativo y que, por el contrario, la tendencia es hacia la disminución.
Los cambios en el etiquetado también han impulsado que la industria alimentaria reformule algunos de sus productos para que sean menos dañinos y contengan menos sellos de advertencia, aseguró en conferencia de prensa por el Día Mundial de la Obesidad, que se conmemora el 4 de marzo.
Previo a esta normativa, alrededor de 17% de los productos quedaba libre de sellos de advertencia y, dijo, ahora la proporción es de 25%.
Sin embargo, reconoció que todavía se requieren esfuerzos para disminuir significativamente la obesidad y el sobrepeso en México. “Los siguientes años son cruciales para ratificarlo o, incluso, ya comenzar a verlo franco. Pero para eso tenemos que redoblar esfuerzos en todos los niveles”, afirmó.
A decir del doctor Ricardo Luna, presidente de la Federación Centroamericana y del Caribe de Obesidad y Metabolismo, en México todavía prevalecen barreras importantes para lograr una mejor atención de la obesidad.