Desde su llegada a la Presidencia de la República, Andrés Manuel López Obrador anunció que su mejor política exterior sería la política interior. Por lo que no fijó como una prioridad el fomento a las relaciones exteriores y de paso, relegó lo que establece el artículo 89 de la Constitución: “la cooperación internacional para el desarrollo”.
“AMEXCID pasó de ser una instancia coordinadora de la cooperación a ser una instancia ejecutora, un cambio muy importante que ha dejado al descubierto una situación de ausencia de una política clara de cooperación internacional en México”, advirtió Sánchez Gutiérrez.

La directora general del "Instituto Mora", explica que la cooperación internacional no necesariamente implica la entrega o recepción de dinero, sino incluye el intercambio de experiencias entre países y lamentó que la institución encargada de coordinar los diferentes esfuerzos de cooperación, se haya convirtió en una ejecutora de programas como Sembrando Vida o Jóvenes Construyendo el Futuro, agencia a la que consideró también le falta transparencia y comunicación del trabajo que está ejecutado.
“El cambio ahora tiene que ver con que la agencia que coordinaba todas las acciones de pronto la colocan como ejecutor y entonces tenemos a la AMEXCID metida en el terreno en Centroamérica haciendo el padrón de las personas que van a ser receptoras de Sembrando Vida o de Jóvenes Construyendo el Futuro”, comenta.
Para Sánchez Gutiérrez un reto es que se tenga una agenda activa en donde se puedan implementar acciones, proyectos, iniciativas con cooperación internacional.
"Hay un reto que tiene que ver con podernos hacer cargo de una concepción nueva de cooperación internacional que trascienda el asunto de la ayuda y visibilizar las acciones enormes que se tienen con varia agencias como la JICA".