"No sé si sea cierto que así hable" –le dijo a Jacobo Molina en la conversación filtrada– pero “nada más le faltó decir yo gran jefe toro sentado”, e imitó la forma de hablar del dirigente: “yo-jefe-gran-nación chichimeca-vengo-Guanajuato, o diputados para nosotros o-no-permitir tus elecciones”.
En el foro académico este lunes, Córdova Vianello recordó que en esa visita la organización reclamó tener la representación de toda la comunidad indígena del país y en aras de eso pidió cargos y dinero.
Como una recompensa a todos los años de discriminación que habían padecido, le plantearon “que el INE les debía proveer asientos en el Congreso… él me dijo, ¿cuántos asientos en el Congreso pueden proveer? Yo le dije, perdón, ninguno, hay una elección, hay campañas. Dijo, ¿entonces cuánto dinero nos puedes dar?... era un chantaje", relató.
“Eso no justifica mis expresiones y me disculpé públicamente por ellas”, recordó, además de que se reunió con Mata, el dirigente de la GNI aludido, al que le ofreció una disculpa privada, como también las presentó ante la Comisión para la no discriminación y Comisión Nacional de Derechos Humanos.
En el foro destacó también que siempre ha sido defensor de los derechos humanos, razón por la que quedó con un mal sabor por lo ocurrido.
Adicionalmente, expresó sentirse orgulloso de lo que pasó después, porque el INE fue el impulsor de acciones afirmativas para garantizar la presencia indígena en el Congreso, lo que da por resultado que hoy los diputados que han sido electos han podido llegar gracias al voto pero también a acciones afirmativas que permitieron sus candidaturas, a las que no tenían acceso antes.
Primero fueron 13 y ahora ya son 28 diputados indígenas resultado de esas acciones afirmativas, y se suman en la pasada elecciones acciones afirmativas que también garantizaron a personas con discapacidad y de ascendencia afroamericana o migrantes, llegar a la Cámara de Diputados, recordó.
La petición de curules no fue planteada sólo al INE, pues también las ha demandado en diversas entidades del país y ha litigado ante tribunales electorales locales y el federal por la negativa a registrar a dirigentes como candidatos o como legisladores.
Todavía en 2020 buscó convertirse en el Partido Indígena Nacional de Pueblos Originarios (PINPO) y ganó ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) que se ampliara el plazo para notificar su interés en realizar asambleas y obtener el registro. Una vez cumplidos los plazos sin completar asambleas pidió el registro en automático, sin más requisitos, lo que le fue negado.