El pasado martes, en conferencia de prensa, el fiscal general Alejandro Gertz Manero destacó que habían nuevos elementos que no solo echaban abajo la "verdad histórica" sobre el caso, sino que permitieron hacer una reconstrucción.
Estos avances son en consecuencia del acuerdo que firmó en marzo pasado el presidente Andrés Manuel López Obrador con la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y la FGR para esclarecer la desaparición de los normalistas.
Tras darse a conocer la recaptura del presunto líder criminal, el Centro Prodh, que es una de las organizaciones que ha acompañado a las familias de los normalistas, pidió a la FGR que perfeccione las acusaciones empleando todas las pruebas disponibles.
Al Poder Judicial de la Federación (PJF) le solicitó actuar con estricto apego a derecho para no abonar a la impunidad que prevalece en el caso.
"Considerando la evidencia legalmente reunida, claramente se trata de un actor relevante para el esclarecimiento del caso, por lo que su presunta responsabilidad debe deslindarse. Para trascender en serio la llamada 'verdad histórica', se necesitan nuevos procesos con pruebas lícitas y, sobre todo, dar con el paradero real de los normalistas", expresó en su cuenta de Twitter.