En contextos enmarcados por altos índices de inseguridad y criminalidad –como ocurre en México– las niñas, niños y adolescentes constituyen uno de los grupos más vulnerables, una muestra de ello es que los asesinatos de menores de edad casi se han triplicado y alrededor de 30,000 de ellos engrosan las filas del crimen organizado, alertó la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
En su informe ’Niñas, niños y adolescentes víctimas del crimen organizado en México’, presentado este miércoles, la CNDH puntualizó que la actual situación de violencia es consecuencia de problemáticas estructurales que resultan "desvastadoras" para los menores.