El 13 de septiembre de 2013 una depresión tropical llamada "Manuel" se generó en el Océano Pacífico. Poco a poco se fue intensificando hasta convertirse en huracán, uno de los más devastadores en el país. A seis años del hecho, de 2,639.6 millones de pesos que se destinaron para la rehabilitación de escuelas en Guerrero, faltan todavía por recuperar o aclarar 20.8 mdp, acuerdo con la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
Aunado a "Manuel", entre ese año y 2014 ocurrieron otros fenómenos naturales que provocaron que la Secretaría de Gobernación (Segob) emitiera al menos seis declaratorias de desastre en el estado. A través del Fondo de Desastres Naturales (FONDEN), el Instituto Nacional de la Infraestructura Física Educativa (INIFED) recibió recursos para la rehabilitación, reconstrucción y equipamiento de las escuelas públicas afectadas por dichos fenómenos.