El silencio del gobierno federal
El jueves 5 de enero continuaba el incendio y ninguna autoridad federal competente, como la Secretaría de Medio Ambiente, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), Pemex o Presidencia, había emitido alguna postura o brindado más apoyo, pese a que los análisis de las muestras de agua arrojaron que fue diésel lo que provocó el fuego.
“Seguimos haciendo un llamado a las autoridades. Como pueden ver, el humo es demasiado. Independientemente de lo que está aquí lastimando al manantial, el daño al medio ambiente que se está ocasionando no es menor”, dijo el presidente municipal de Jilotepec.
Deslindan a Pemex
Hasta el 6 de enero, tras preguntas de medios de comunicación en la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador, el gobierno federal informó, por fin, sobre el incendio en el manantial de Mexicaltongo.
Adán Augusto, titular de la Secretaría de Gobernación, aseguró que la causa no fue una fuga de hidrocarburos, sino un derrame de residuos tóxicos “altamente contaminantes” de una empresa particular.
“Eso es lo que ocasionó el incendio, se está atendiendo”, afirmó.
Agregó que Pemex atendía el problema en conjunto con la Conagua, Protección Civil federal y del Estado de México.
“Seguramente, en los próximos días debe quedar controlado, pero viene un trabajo de limpieza. Se está platicando con los pobladores. Aunque no es responsabilidad de Petróleos Mexicanos, Petróleos Mexicanos coordina los trabajos y mantiene el diálogo con ellos”, zanjó el secretario.