“Queremos ofrecer una disculpa honesta y sincera, sin dobleces y sin ningún tipo de ambigüedades. Tenemos que reconocer que en este acto de terror y barbarie se cometieron violaciones graves a los derechos humanos, a la legalidad, a la seguridad jurídica, a la integridad física y seguridad personal y a la vida en agravio de al menos 63 víctimas”, aseguró este miércoles.
En 2012, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CDNH) y la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV), emitieron la Recomendación 66/2012, en las que se dispusieron las acciones que debían acatar las autoridades de los tres niveles de gobierno en respuesta a las violaciones de derechos humanos a fin de cumplir con las medidas de satisfacción y no repetición que reconozcan la dignidad de los inocentes agraviados.
Entre las acciones se encontraba ofrecer una Disculpa Pública por los hechos y la insuficiente respuesta de la autoridad, acto que se realizó este 31 de agosto.
El subsecretario Encinas señaló que el Estado mexicano en su conjunto no fue capaz de garantizar las condiciones de seguridad, integridad y protección que correspondías, y que no era un acto protocolario más para atender la recomendación, sino que era “un acto de justicia en la memoria de las víctimas” y en su derecho de conocer la verdad y se castigue a los responsables.
“Yo vengo en el nombre de México, del Estado mexicano, no solamente a cumplir con esta recomendación –que es nuestra responsabilidad– sino lo hacemos con plena convicción porque no solamente desde que sucedieron estos hechos hemos acompañado esta lucha”, aseguró.